Maroto suaviza su discurso para lograr un acuerdo con la oposición

El alcalde de Vitoria, Javier Maroto (PP), ha adquirido este lunes un “compromiso ético que posibilite lograr un acuerdo con el resto de grupos entorno a las políticas sociales”, basado en “el respeto al diferente y la lucha contra el racismo, el trabajo por la justicia social y la lucha contra el fraude en las ayudas sociales, así como en facilitar la integración social”.

A pesar de que el PP consiguió el mayor número de concejales (9) las pasadas elecciones, la candidata de EH Bildu, Miren Larrion, ha celebrado varias reuniones con el resto de grupos de la oposición para “desalojar” a Maroto de la Alcaldía, por su discurso contra ciertos colectivos de inmigrantes que cobran ayudas sociales, a los que ha llegado incluso a acusar de no querer trabajar.

La posición de la coalición ha sido respaldada por varias personalidades de la ciudad como el exalcalde Jose Ángel Cuerda, así como por la plataforma 'Gora Gasteiz' que nació para reivindicar una Vitoria solidaria frente al racismo y la exclusión. Todos ellos han reclamado a los grupos de la oposición del Ayuntamiento que lleguen a un acuerdo para que no vuelva a gobernar Maroto por su discurso “xenófobo”.

A seis días de que se celebre el pleno de investidura del alcalde, Maroto ha leído una declaración con la que ha querido ser “firme y contundente” con el objetivo de que “nadie pueda relacionar nunca más” sus palabras con el racismo.

“Lo que voy a decir hoy es lo que he querido decir siempre antes pero a la vista está que no he sido lo suficientemente claro o no lo he sido para todos y por ello debo hacer autocrítica”, ha señalado.

Según ha explicado, esta declaración no quiere que sea un “gesto” sino que quiere “dar un paso más allá ”y adquirir “un compromiso ético que posibilite lograr un acuerdo con el resto de grupos entorno a las políticas sociales”.

Maroto ha basado un “compromiso ético” en tres “pilares” que ha asegurado que para él son “fundamentales”. De esta forma, se ha comprometido a “respetar al diferente y luchar contra el racismo y la intolerancia para garantizar la convivencia y cohesión social, potenciando el valor de la solidaridad como seña de identidad indiscutible de Vitoria”.

También ha apostado por “trabajar por la justicia social efectiva y por erradicar el fraude en las ayudas sociales, independiente de quien sea la persona que lo cometa” y a “facilitar la integración social de quiere pueden sufrir la exclusión por razones económicas, culturales, orientación sexual, genero, discapacidad, raza o nacionalidad”.

No es “rectificar”

Maroto ha precisado que gesto no supone “rectificar, ni es un giro” sino que se trata solo de “ser clarísimo y contundente” porque “no puedo seguir permitiendo que el racismo se asocie a mi persona”. “Voy a seguir defendiendo sin dar un paso atrás en mis convicciones que hay que atajar el fraude en las ayudas sociales”, ha insistido.

Por otro lado, ha realizado un balance de estos cuatro años de Gobierno municipal asegurando que la “participación de los grupos ha sido muy positiva”, y en concreto, ha destacado el papel del grupo municipal del PNV, “que ha prestado su apoyo” en cuestiones como “el pacto de equipamientos”. “Me voy a dejar la piel en continuar acordando y pactando en Vitoria”, ha concluido.