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“Los periodistas deben recordar que su trabajo es molestar al poder porque los políticos mienten”

Sexta mesa de encuentro sobre Periodismo Comprometido celebrada por Oxfam Intermón en Bilbao.

Laura Murillo Rubio

Bilbao —

“El periodismo debería ser comprometido por definición pero actualmente no lo es”, esta es la premisa con la que arrancaba el sexto encuentro de Oxfam Intermón sobre ‘Periodismo Comprometido’ celebrado en Bilbao y que ha contado con las intervenciones de los periodistas Ramón Lobo, Virginia Pérez y Gumersindo Lafuente. El sector de la información ha sido y es uno de los más afectados por la crisis económica, y esa disminución de recursos se ha notado en los contenidos que ofrecen los medios de comunicación. Y es que las voces que compartían las historias de lo más desfavorecidos se han visto mermadas por la escasez económica.

“En la situación actual resulta imposible enviar a un periodista dos semanas fuera para sacar un buen reportaje y ello ha afectado a los más necesitados. Esto nos repercute directamente a las ONG, porque si los profesionales de la información no lo cuentan, ¿quién lo va a contar?”, planteaba para abrir el debate la moderadora Lucila Alarcón, directora de comunicación de Oxfam Intermón.

El periodista y reportero de guerra Ramón Lobo abría el turno de intervenciones para recordar que “el periodismo tiene un compromiso con la verdad y con los lectores para tratar de explicar el mundo complejo que nos rodea”. “Los periodistas siempre tenemos que ir al terreno para entender lo que sucede y contar las pequeñas historias que están dentro de la historia general”, decía. “En toda información las personas tienen que estar presentes porque sin ellas no hay historia” ha remarcado el reportero.

Del mismo modo, Lobo insistía en que “los periodistas deben recordar que su trabajo es molestar al poder porque los políticos mienten por definición”. “No debemos creernos absolutamente nada de lo que dice el poder, esta es la actitud que debe tener el periodista frente a la política o la economía”, ha dicho.

Por su parte, la directora adjunta del diario 20 minutos, Virginia Pérez, compartía la misma idea que su compañero sobre que “los periodistas no pueden convertirse en portavoces políticos porque su labor es estar con los ciudadanos”. A su vez, Pérez comentaba que “muchos consejos de administración de los medios de comunicación están en manos de los bancos y esto afecta directamente a la credibilidad del medio porque la información termina estando condicionada”. “La credibilidad va de la mano del periodismo y sin ella no vamos a llegar a nada. Tenemos la responsabilidad de cargar con esa mochila mientras ejerzamos esta profesión”, ha asegurado.

Según Pérez, “el nuevo periodismo también tiene que empezar a desmontar bulos para situarse siempre del lado del más débil”. Cuando cometemos errores no debemos minimizarlos, sino pedir perdón, y siempre hay que fomentar la duda porque las verdades absolutas son muy malas compañeras del periodismo“, ha apuntado.

En palabras de Gumersindo Lafuente, impulsor de la fundación PorCausa, y colaborador de eldiario.es, “el periodismo comprometido comienza por uno mismo, no hace falta irse lejos a otro país”. Así, Lafuente califica el oficio del periodista como “apasionante, pero extremadamente delicado” puesto que en la actualidad “hay un gran control de este trabajo debido en gran medida a las redes sociales”. En este sentido, el periodista apuntaba que “los medios sociales se han convertido en un escenario de verdaderas luchas por el poder para ver quién consigue más visitas”. Según Lafuente, “el problema es que se confunde periodismo con comunicación cuando no son lo mismo”. “Los periodistas debemos desbrozar una información para transmitirla y con nuestro trabajo diario demostrar que el periodismo sigue siendo absolutamente necesario”, ha insistido.

Sobre la situación actual en los grandes grupos de información, Ramón Lobo ha señalado que “los problemas de los grandes periódicos son estructurales y no de sus directores”. Virginia Pérez, por su parte, ha mostrado su malestar porque “los cambios en los medios son conservadores y no para dar un salto hacia delante”. En el mismo sentido, Lafuente defendía la labor y profesionalidad de los jóvenes. “En este país hay gente joven para afrontar cambios en los medios, pero los ‘dinosaurios’ se lo impiden”, concluía el periodista.

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