El Ejército israelí declara zona militar la casa tomada por un centenar de colonos en Hebrón

El Ejército israelí declaró hoy zona militar cerrada la casa tomada anoche por un centenar de colonos en la ciudad palestina de Hebrón, en el sur del territorio ocupado de Cisjordania, y mantiene a sus tropas destacadas a su alrededor, informaron fuentes militares a Efe.

“Se ha declarado una zona militar cerrada en el área de una vivienda cercana a la Cueva de Majpelah (Tumba de los Patriarcas)”, señaló una portavoz militar, que confirmó que hay tropas controlando la seguridad en los alrededores de la vivienda.

Según el digital Ynet, la decisión de impedir el acceso a civiles a la zona se ha tomado, para evitar que más colonos se unan a los alrededor de 120 que anoche tomaron la vivienda.

La propiedad del edificio se encuentra en litigio entre los israelíes que aseguran que la compraron hace cinco años y una familia palestina que afirma que no la vendió y que los documentos presentados son falsos.

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha ordenado al ministro de Defensa, Avigdor Lieberman, no expulsar por el momento a las quince familias ocupantes, informó el digital Times of Israel.

El portavoz de los colonos, Shlomo Levinger, aseguró que el edificio de cinco plantas les pertenece y que fue comprado legalmente.

Hace cinco años, un grupo también numeroso de colonos tomó el mismo edificio por unos días, antes de ser evacuado por las Fuerzas de Seguridad israelíes, que consideraron que no tenían pruebas de propiedad suficientes.

La ONG israelí Shalom Ajshav (Paz Ahora) pidió anoche a las autoridades que expulsen de inmediato a los colonos que “se han tomado la justicia en sus propias manos y establecido un asentamiento ilegal que puede incendiar la región”.

“Hacemos un llamamiento al primer ministro y al Ministro de Defensa para cumplir con la ley y el interés de Israel y evacuar a los intrusos sin demora”, señaló en una nota.

Hebrón es la única ciudad palestina que tiene asentamientos judíos en su núcleo urbano y al Ejército desplegado en parte de su centro histórico, especialmente alrededor de la Tumba de los Patriarcas.

El lugar, sagrado para las tres religiones monoteístas, es denominado por los musulmanes como la Mezquita de Ibrahim y por los judíos como la Cueva de Majpelá, y en él están enterrados tres parejas de patriarcas bíblicos: Abraham y Sara, Isaac y Rebeca, y Jacob y Lea.

Este incidente coincide con un aumento de la violencia en la zona, con disputas en torno a las medidas de seguridad impuestas por Israel en los alrededores de la Explanada de las Mezquitas tras el ataque del pasado día 14 en el que tres árabe israelíes mataron a dos policías drusos israelíes en una de las puertas de acceso antes de ser abatidos.

Israel retiró ayer los polémicos detectores de metales ante el rechazo de los fieles musulmanes a atravesarlos, pero estos se oponen también a las “cámaras inteligentes” que pretenden sustituirlos y exigen el retorno al statu quo anterior al ataque.