Alberto Garzón pide a sus bases que refrenden la posición de IU en la negociación con Podemos
Alberto Garzón quiere blindar, con ayuda de los militantes de IU, su pretensión de negociar un nuevo nombre con Podemos para la confluencia electoral del ciclo 2019-2020. La Asamblea Político y Social de la coalición aborda este sábado el debate y votación del documento con sus exigencias para unas conversaciones que se prolongan ya varios meses. El líder de IU ha propuesto ante el máximo órgano del partido someterlo a un referéndum entre sus bases.
El documento Bases para la confluencia electoral 2019, adelantado el jueves por eldiario.es, recoge la posición que mantiene IU desde que arrancaran las negociaciones con Podemos el pasado invierno.
Algunas de las reivindicaciones que ha sostenido la organización de IU ya han sido aceptadas, como la figura jurídica de la coalición electoral estatal. Otras, no. Y en IU las consideran imprescindibles para poner en marcha un proyecto que tenga condiciones de partida que permita ganar las autonómicas, municipales y europeas. O, al menos, disputarlas de verdad.
Los dos principales escollos pasan por el nombre de la marca y la fórmula para componer las listas electorales. Esta segunda cuestión se ha trasladado a las organizaciones autonómicas y municipales, respectivamente. IU solo plantea sugerencias que, con el refrendo de las bases, se podrán defender de forma más contundente en las negociaciones que se pongan en marcha en regiones y municipios después del verano. Pero, en cualquier caso, serán cuestiones que se determinen fuera de las conversaciones que mantienen los secretarios de Organización de ambas formaciones, Pablo Echenique por Podemos e Ismael González por IU.
La cuestión de la marca electoral sí se presenta como un problema porque debe resolverse en el ámbito estatal. IU rechaza Unidos Podemos. Garzón nunca estuvo cómodo con un nombre que, cree, deja fuera a su propio partido. En IU piensan que el nombre es, en parte, responsable del batacazo del 26J. Y también de la desafección posterior que parte del electorado que se referencia sin dudas en la izquierda y que señalan de forma reiterada las encuestas.
Podemos, sin embargo, apuesta por mantener una marca que, creen, funciona y que cumple su principal requisito: recoger el nombre del partido.
IU plantea en su documento que “cualquier proceso de confluencia debe tener una marca que represente adecuadamente a las partes integrantes a fin de que sean reconocidas como tales por el electorado”. Y propone “la búsqueda de un nombre y marca común con el que se sientan interpeladas todas las fuerzas políticas que forman parte”.
En caso contrario, “IU defenderá que los nombres de las organizaciones políticas estén presentes para representar a los diferentes actores”.
