Rubalcaba insta a Santamaría, “reina de la transparencia”, a aclarar por qué el PP borró un disco duro virgen

El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha pedido este martes a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que explique por qué su partido destruyó el disco duro de un ordenador del extesorero Luis Bárcenas, y más aún si resulta que el disco estaba vacío. “Ella que es la reina de la transparencia”, ha ironizado Rubalcaba en una intervención ante el Grupo Parlamentario Socialista.

“¿Verdad que suena raro destruir un disco duro que es virgen?”, se ha preguntado Rubalcaba ante los suyos, en la primera reunión del Grupo del nuevo 'curso' parlamentario. El jefe de la oposición ha aludido a la vicepresidenta porque poco después Sáenz de Santamaría ha reunido también a los diputados del PP en otra sala del Congreso.

El jefe de la oposición se ha referido a esta cita de la vicepresidenta con los 'populares' para explicar el “lapsus freudiano” que ha tenido el secretario general del Grupo, Eduardo Madina, que al inicio de la reunión socialista ha disculpado la ausencia de la portavoz del PSOE, Soraya Rodríguez, confundiendo su nombre con el de la vicepresidenta.

“Es un lapsus freudiano normal porque el grupo mayoritario nos ha quitado la sala donde habitualmente nos reunimos”, ha bromeado Rubalcaba. El socialista ha querido destacar que “esta vez” Sáenz de Santamaría iba a hacer un discurso abierto a la prensa, una hora después de hacerlo él y ha bromeado con la posibilidad de “dejarle algunas preguntas” sobre Bárcenas y sus discos duros.

Soraya Rodríguez se ha incorporado a la reunión poco después, tras participar en una reunión de la Junta de Portavoces del Congreso y conocer el veto del PP a varias iniciativas parlamentarias para que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, rinda cuentas por el 'caso Bárcenas'.

RODRÍGUEZ, TRAS LA JUNTA: “COMO SI VINIERA DE UN JUICIO”

“¿Cuántos 'noes' has cosechado de este Gobierno tan transparente?”, le ha preguntado Rubalcaba mientras ella tomaba asiento a su lado. “Como si viniera de un juicio”, le ha replicado la portavoz, justo antes de que su jefe de filas le pidiese que tuviera “cuidado” porque esa parte de la reunión estaba siendo retransmitida a los periodistas.

Tras el nuevo veto del PP a que el Congreso reclame explicaciones por el caso, el jefe de la oposición ha advertido de que “contra el vicio de negar está la virtud de reiterar” y de que el PSOE seguirá presentando iniciativas parlamentarias para no “permitir” lo que a su juicio pretende Rajoy: que el escándalo de Bárcenas “se metabolice” y “se deje de hablar” del tema. “Eso sí que es tóxico para la democracia, eso no puede ser y no lo vamos a permitir”, ha apostillado.

“VAMOS A HABLAR DE FINANCIACIÓN ILEGAL PORQUE LA HUBO”

Para los socialistas, este escándalo tiene que dilucidarse en el Parlamento y la comparecencia de Mariano Rajoy el pasado 1 de agosto no sirvió de nada porque el presidente “mintió”. “Vamos a discutir este tema aquí. Vamos a hablar de financiación ilegal del PP porque la hubo, de sobresueldos en negro porque los hubo, de campañas con un partido dopado porque lo hubo”, ha advertido Rubalcaba.

Y además, ha adelantado que seguirán pidiendo explicaciones por las “mentiras” porque “lo peor en democracia es que un presidente mienta al Parlamento y no se le mueva un solo músculo”. Si el PP niega las iniciativas, el PSOE volverá “con otra porque no puede amordazarse a un Parlamento”. En democracia, ha avisado Rubalcaba a Rajoy, “él no es quién para decir lo que debate el Parlamento”: “Eso de 'se acabó ya no hablo más de esto' son otros regímenes los que lo permiten”.

El jefe de la oposición ha subrayado ante los suyos que después del verano siguen presentes las tres crisis con que finalizó el 'curso' anterior, la económica, la territorial y la política y ha remarcado que en el asunto Bárcenas se han confirmado las mentiras de Rajoy.

Y ha advertido a los 'populares' de que están incurriendo en una “quiebra moral”, por aprobar recortes en las indemnizaciones por despido y luego “pagar indemnizaciones fabulosas y en negro” a gente como el exgerente Cristóbal Páez.