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El País acusa a Sánchez de sufrir “manía persecutoria” un día después de su dimisión
Después de llamarle “insensato sin escrúpulos” en su editorial del día que se desató la guerra en Ferraz, El País ha continuado cargando contra el ya exsecretario general del PSOE el día después de su derrocamiento. En un análisis firmado por Rafa de Miguel, llegan a afirmar que “el núcleo dirigente y de asesores del que se rodeó contribuyó a cultivar en su cabeza una manía persecutoria, casi obsesiva”, respecto a las amenazas de los “dirigentes territoriales críticos”, especialmente “Susana Díaz”.
En su editorial postdimisión, además, hablan de una “profundísima división” en el partido que puede dejarlo “fracturado e inutilizado como alternativa de gobierno”. Y como responsable último de ese destrozo, “tanto de las derrotas como de la división”, un sólo nombre: “su secretario general saliente, Pedro Sánchez”. Ha sido su enrocamiento, dicen, lo que ha llevado al “caos” en el partido.
“Resulta revelador que el secretario general haya logrado unir en su contra a muchos de los que hasta hace poco rivalizaban entre ellos, desde expresidentes y secretarios generales a líderes territoriales”, afirman contra Sánchez.
Por otro lado, la defensora del lector decía acudir ante una “emergencia” tras cerca de “cien mensajes sumamente críticos con nuestra cobertura inicial de la crisis del PSOE”, sobre todo referidos al editorial titulado 'Salvar al PSOE', en el que le tachaban de “insensato sin escrúpulos”.
La defensora reconoce “excesos verbales” contra el ya exdirigente socialista, pero lo justifica refiriéndose a otro editorial, del 26 de mayo de 2013, donde se decía que el expresidente Aznar era “tóxico” y estaba “escupiendo frases y adoptando modales que si no fueran patéticos resultarían ridículos”.
La portada de El País es, además, la única de los periódicos editados en Madrid en la que no se opta por una foto de Sánchez sino por una del interior del Comité Federal.
