@Retiario estudió biología pero siempre quiso aprender y contar historias reales. En tiempos remotos fue paleontólogo, pero desde hace décadas es periodista y profesor de periodismo. Cree en la ciencia, la tecnología y el poder de la humanidad para cambiar las cosas para bien, si se aplica. Pasa la mayor parte de su tiempo en Internet y es un firme defensor de la pluma (y la red) frente a la espada.
Buenas noticias: tu perro te quiere
Por mucho que queramos y que lo intentemos, y a pesar de que a veces estemos casi seguros de saberlo, es imposible saber qué piensa un perro, porque no somos un perro.
Aunque un científico estadounidense ha intentado con todas sus fuerzas averiguarlo, para lo cual ha entrenado a múltiples canes para poder aplicarles una técnica de análisis cerebral llamada Resonancia Magnética Nuclear Funcional que mide las regiones del cerebro que se activan a realizar ciertas tareas.
No ha sido fácil: esas máquinas son ruidosas y extrañas y los animales no podían ser drogados, porque eso modificaría su respuesta.
Pero con paciencia y mucha mano izquierda consiguieron adiestrar a 90 perros y analizaron sus respuestas descubriendo cosas interesantes.
Por ejemplo, que procesan la información en las mismas regiones que nosotros y que reconocen caras de un modo parecido a como lo hacemos los humanos.
Y también que puestos a elegir entre comida o cariño de sus amos hay una clara preferencia de nuestros caninos amigos por esto último: es decir, que hay razones para pensar que el cariño de su perro no se debe a que seamos su fuente de alimentación, sino al verdadero amor.
A veces la ciencia en lugar de destrozar ilusiones confirma nuestros anhelos: en efecto, no es interés: Fido nos ama.
Sobre este blog
@Retiario estudió biología pero siempre quiso aprender y contar historias reales. En tiempos remotos fue paleontólogo, pero desde hace décadas es periodista y profesor de periodismo. Cree en la ciencia, la tecnología y el poder de la humanidad para cambiar las cosas para bien, si se aplica. Pasa la mayor parte de su tiempo en Internet y es un firme defensor de la pluma (y la red) frente a la espada.