Andalucía mantendrá la asistencia sanitaria a inmigrantes y rechaza “las amenazas” del Gobierno

La Junta de Andalucía continuará garantizando asistencia sanitaria a los extranjeros que no tienen regularizada su residencia en la comunidad autónoma y que carecen de recursos económicos. En este sentido, el consejero de Salud, Aquilino Alonso, ha calificado de “inadmisibles las amenazas” del Ministerio de Sanidad y ha destacado que en Andalucía siempre han defendido “la universalidad de la sanidad pública sin hacer distinciones en función de los recursos”. 

El consejero incluye este compromiso porque es “una decisión solidaria que intenta proteger a la población más vulnerable y sin recursos” y ha recordado que en Andalucía se viene garantizando esta asistencia desde 1999. Igualmente, desde ese año, Andalucía ha garantizado la asistencia sanitaria “mediante diferentes instrucciones que se han ido adaptando a las necesidades de cada momento y siempre dentro de la legalidad vigente y la competencia autonómica”.

“La atención sanitaria a extranjeros no regularizados se mantendrá, por tanto, por razones humanitarias y de salud pública”, ha señalado el consejero, quien, además, ha indicado que es “absolutamente falso” que esta protección a inmigrantes “incumpla o pueda contravenir los acuerdos sobre asistencia sanitaria a ciudadanos de países miembros de la Unión Europea”.

Ha recordado que el propio ministerio ha remitido a las comunidades autónomas el documento Acuerdo sobre criterios mínimos para la dispensación de asistencia sanitaria y protección a la salud a extranjeros en situación irregular, con el objeto de homogeneizar el servicio. Con este documento, según Aquilino Alonso, el ministerio ha intentado “consensuar con las comunidades autónomas la asistencia a inmigrantes y, de forma general, volver a la situación anterior al Real Decreto Ley de 2012 que los dejaba fuera”.

Por eso no entiende que “ahora” se amenace “con penalizaciones y sanciones” y ha exigido “coherencia y claridad” al Ministerio de Sanidad porque “no se puede jugar con la salud de personas tan vulnerables como los inmigrantes sin recursos que llegan a nuestro país”.

Poca frecuentación

En Andalucía, la población inmigrante recibe un documento de reconocimiento temporal que se emite en los distritos de atención primaria y que garantiza el acceso al sistema sanitario público dentro de la comunidad autónoma. Este documento es fruto de diversos convenios suscritos con asociaciones y organizaciones no gubernamentales al objeto de facilitarle a este colectivo su acceso al servicio con todos los derechos. Con este documento se hace posible la identificación y permite hacer un seguimiento de los servicios que se les presta y de su estado de salud.

El número de documentos temporales distribuidos entre la población inmigrante ha descendido, en los últimos años, en paralelo a la disminución de extranjeros. Desde que en 2012 entrara en vigor el real decreto que los deja sin cobertura, Andalucía ha reconocido el derecho a la asistencia sanitaria a más de 110.000 que “se hubieran quedado sin prestación”. En este sentido, la consejería ha indicado que, actualmente, son 27.000 los inmigrantes que tienen documento sanitario temporal. De hecho, entiende que su exclusión no es “una medida de ahorro, ya que su frecuentación es baja”. La atención sanitaria a la población inmigrante no regularizada supone una mínima parte del total. La frecuentación de estas personas a los centros de salud sólo representa el 0,6% de las consultas totales, el 2,3% de la asistencia a urgencias y el 7% de los partos.