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ErNE quiere la cabeza del actual Departamento de Seguridad

Roberto Seijo, líder de ErNE, en el centro con otros dirigentes de la principal central de la Ertzaintza.

Aitor Guenaga

El sindicato ErNE ha dejado claro cómo quiere empezar la nueva legislatura que arranca este viernes en Euskadi con la constitución de la Camara vasca: con un cambio profundo en el equipo que ha dirigido el Departamento de Seguridad, encabezado por la consejera Estefanía Beltrán de Heredia y su 'número dos', Josu Zubiaga, y la Ertzaintza, en manos de su director, Gervasio Gabirondo.

El secretario general de la central mayoritaria en la Ertzaintza, Roberto Seijo, en una dura intervención contra la cúpula de Seguridad nombrada por ahora en lehendakari en funciones, Íñigo Urkullu, ha llegado a asegurar que su actuación al frente de la seguridad pública ha sido “con diferencia el peor equipo gestor de los últimos 30 años”. Una legislatura, ha afirmado el líder de ErNE, en la que no se ha cerrado ningún acuerdo sindical en materia de condiciones laborales y cuya mejora se ha producido al golpe de sentencia en los tribunales, según Seijo.

“No ha existido diálogo sobre modelo policial, incluso en aquellas materias que colisionaban frontalmente con las condiciones de trabajo de los ertzainas”, ha resumido el líder sindical, quien ha denunciado el “desmantelamiento de servicios esenciales de la estructura de la Ertzaintza”. “La policía no es una fábrica de tornillos y se han aplicado técnicas de trabajo del siglo pasado, donde la misión, visión y valores están sustentados sobre las estadísticas, lo que nos ha trasladado a ser actualmente una de las policías europeas más burocratizadas”.

Por todo ello, sn la comparecencia ante los medios en la sede del sindicato este lunes, Seijo, ha manifestado su deseo de que el actual equipo del Departamento de Seguridad no continúe al frente del mismo después de “la pesadilla” que a su juicio han sido sus cuatro años de gestión.

Según ha denunciado, “no ha existido diálogo sobre el modelo policial, ni siquiera en las materias que colisionaban frontalmente con las condiciones de trabajo de los agentes” y “han desmantelado servicios esenciales de la estructura” de la policía vasca, como la propia academia de Arkaute.

El conflicto “sigue latente”

ErNE ha situado de nuevo el origen de esta “pesadilla” y del “caos organizativo” que arrastra el cuerpo en la puesta en marcha del Plan Horizonte 2016, diseñado e impulsado -entre otros- por Gervasio Gabirondo. Y a los dirigentes del sindicato mayoritario en la policía vasca les ha molestado profundamente la noticia adelantada la pasada semana por este periódico: el anuncio del director de la Ertzaintza en funciones de una reunión ante los responsables del cuerpo policial para detallar el nuevo plan Horizonte 2017-2020, cuando “todavía no se ha constituido el Parlamento ni se ha conformado el Gobierno Vasco”, en palabras del secretario de Organización de la central sindical, José Luis Moreno.

A juicio de este dirigente y brazo derecho del secretario general, esa reunión supone un acto “prepotencia” porque evidencia que se presupone su continuidad en ese cargo. Una atribución que resulta “totalmente fuera de lugar” y “un auténtico disparate”, al tiempo que ha pedido que Gabirondo no repita al frente de la Ertzaintza.

El sindicato ha acompañado esta fotografía tétrica de la gestión del equipo que lidera Estefanía Beltrán de Heredia con el anunciado de que retomará las concentraciones y manifestaciones para presionar en favor de un cambio. En principio tiene previsto concentrarse el próximo 21 de octubre ante el Parlamento vasco, para hacer evidente que el conflicto de la Ertzaintza “sigue latente”.

Roberto Seijo no ha quemado todas sus naves en la incendiaria intervención de este luenes y ha mostrado su disposición al diálogo y al encuentro en aras a avanzar hacia “la recuperación de los derechos perdidos”.

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