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Numerosos refugiados se movilizan en Idomeni tras correr el rumor de la apertura de la frontera
- El Gobierno griego ha enviado autocares al campamento para traslados voluntarios, pero solo unas 600 de las 11.000 personas que acampan allí, han accedido
Numerosos refugiados se han concentrado este domingo en el campamento de Idomeni para tratar de cruzar hacia la Antigua República Yugoslava de Macedonia (ARYM) tras propagarse el rumor de que abriría el paso fronterizo.
Según informan medios locales presentes en este campo, desde primeras horas de la mañana comenzaron a llegar migrantes y refugiados desde centros de acogida cercanos y a reunirse en las vías del ferrocarril que atraviesa este campamento improvisado.
“Hemos oído que hoy van a abrir la frontera y hemos venido a cruzarla. Nos dijeron que con nosotros estarían la Cruz Roja y 500 periodistas de todo el mundo”, dijo a la agencia de noticias griega AMPE un joven sirio que llegó en la madrugada a Idomeni desde Yiannitsa, un centro de acogida cercano.
La policía ha advertido de que la frontera no abrirá y que quien intente cruzarla pone en riesgo su vida. Además cortó las carreteras de acceso al campamento, lo que retrasó la llegada del convoy humanitario con alimentos y productos de primera necesidad traído desde Italia por la campaña solidaria #overthefortress.
El Gobierno ha enviado autocares
“Todos los días tenemos nuevos rumores, estamos en un entorno donde es fácil que se propaguen porque no hay información real”, explicó a Efe el portavoz de Médicos Sin Fronteras en el campamento, Jonas Hagensen.
Según Hagensen, el grave problema de este campamento es precisamente la falta de “información válida”.
En declaraciones a la cadena de televisión privada Mega, el portavoz del centro de gestión de crisis, Yorgos Kyritsis, no quiso excluir que detrás de estos rumores haya gente que quiera explotar el sufrimiento de los refugiados. Sin embargo, no se sabe con certeza el origen de los mismos.
“Crear expectativas que no pueden cumplirse entre personas que sufren es algo que no debe hacerse. Hay que ser muy cuidadoso con la solidaridad y las ONG deben informar cuando circule este tipo de información”, sostuvo. Las protestas de hoy pueden suponer un revés adicional a los esfuerzos del Gobierno de desalojar Idomeni pacíficamente.
El viernes, el Gobierno envió autocares al campamento para animar a las más de 11.000 personas que se encuentran en pésimas condiciones allí a que se trasladen a centros de acogida cercanos. Hasta la mañana de este domingo habían partido once autocares con unas 700 personas.
La mayoría, sin embargo sigue reacia a abandonar el campamento, pues todavía confía en poder cruzar la frontera. Kyritsis anunció que a partir de este lunes se redoblarán los esfuerzos para convencer a la gente a que abandone el lugar. Mientras tanto, el número de nuevas llegadas se mantiene bajo estos días, y en las últimas 24 horas han llegado a las islas griegas desde la costa turca 73 personas, todas a Lesbos.
A falta de información oficial fiable, muchas personas se acercan a ONG como Médicos Sin Fronteras para obtener algún tipo de consejo, tanto sobre la apertura de fronteras como sobre la situación de los otros centros de acogida.
“Quieren saber si es mejor irse o quedarse. Si van a abrir las fronteras o si se les va a devolver a Turquía, pero nosotros no les podemos aconsejar, solo intentamos mejorar su situación en este campamento y decirles que si quieren también pueden ir a uno de los centros de acogida que ofrece el Gobierno. No somos una autoridad oficial”, ha explicado Hagensen.
En total, el número de personas repartidas por todo el país ascendía este domingo a las 07.30 hora local (04.30 GMT) a 50.256, de las que 11.500 se encuentran en Idomeni.
