El cambio ansiado: las lluvias llegan a Andalucía en el comienzo del invierno astronómico

En diciembre de 2009 Andalucía atravesaba una situación de sequía estacional parecida a la que vive hoy. Hasta entonces la región atravesaba uno de los otoños más secos de los últimos lustros, con una dinámica de bloqueo anticiclónico muy similar a la que desde el comienzo de estación predomina sobre el sur de la Península Ibérica. Sin embargo, coincidiendo con la entrada del invierno, la atmósfera atlántica vivió un cambio de configuración que llevaría a un prolongado periodo de lluvias gracias al paso continuado de borrascas. Entonces las altas presiones se desplazaron hasta Groenlandia, abriendo en su flanco sur un corredor para el transporte de áreas de baja presión.

Hoy, como en 2009, los modelos de previsión a corto y medio plazo vuelven a dibujar un amplio y consistente área anticiclónica sobre la vertical groenlandesa. Coincidiendo con el comienzo del invierno astronómico, las lluvias volverían a regar de manera abundante la mitad sur peninsular. Aunque los próximos días el ambiente suave y estable vaya a seguir predominando en toda Andalucía, desde el próximo martes 21 de diciembre el paso de una borrasca atlántica marcará un cambio significativo en la tendencia atmosférica de los primeros días del invierno.

Fin de semana de estabilidad en el interior y mala mar en la costa

El fin de semana arrancará con cielos poco nubosos o despejados en la mayor parte de la región. A excepción del litoral mediterráneo, el resto del territorio andaluz mantendrá la inercia de ambiente estable, soleado y de temperaturas suaves de días atrás. En la costa, sin embargo, gracias al flujo de levante que impondrá un área de baja presión aislado sobre el entorno del Cabo de San Vicente, servirá como combustible húmedo para la formación de chubascos que salpicarán la vertiente mediterránea de la Comunidad a lo largo del fin de semana.

Junto a las precipitaciones que se registrarán durante las jornadas de sábado y domingo en el área del Estrecho y el levante almeriense, el viento también soplará con relativa fuerza. La Agencia Estatal de Meteorología mantiene activos entre las jornadas del jueves 16 al sábado 18 avisos de nivel amarillo y naranja por fenómenos costeros. Las rachas de viento de componente este, podrán superar los 70 km/h, dejando un oleaje de entre 3 a 4 metros de altura a lo largo de todo el litoral mediterráneo y la vertiente atlántica del Estrecho de Gibraltar.

Entre 30 y 50 litros de acumulado en el comienzo del invierno astronómico

Con el cierre del fin de semana, la atmósfera andaluza empezará a notar los primeros síntomas de cambio. Hasta el extremo occidental llegará la primera avanzadilla de lluvias que afectarán a la región con el cambio de estación. La aproximación hasta la Península de la primera borrasca del episodio provocará un aumento de la nubosidad en las provincias occidentales a últimas horas del domingo. La lluvia hará acto de presencia, de manera débil, en la provincia de Huelva, para extenderse a otros puntos del tercio occidental durante la mañana del lunes.

Pero las lluvias ganarán en expansión e intensidad a partir del martes 21. Para entonces, coincidiendo con el comienzo del invierno astronómico, el paso de un frente frío asociado a la borrasca dejará precipitaciones generalizadas en toda la Comunidad, siendo más abundantes en las provincias occidentales. Las lluvias podrían dejar acumulados de unos 30 litros por metro cuadrado en la mayor parte de la mitad occidental y del litoral, pudiendo superarse los 50 litros de manera puntual.

Máximas a alza: hasta 24 grados en el valle del Guadalquivir

Las temperaturas, que se habrán mantenido muy estables durante el fin de semana, con heladas puntuales a primeras horas de la mañana en zonas de valles y mesetas, experimentarán una importante subida con la llegada de las lluvias. La llegada del frente arrastrará aire húmedo y templado hasta la vertical andaluza, provocando un ascenso en las máximas de entre 3 a 4 grados. Para la tarde del martes 21 podrían volver a registrarse temperaturas superiores a los 20 grados en la mayor parte del interior occidental pudiendo llegar a registrarse puntualmente máximas de hasta 24 grados en el valle del Guadalquivir. El flujo húmedo también hará subir las mínimas, que escalarán hasta el entorno de los 8 a 10 grados en la mayor parte del territorio andaluz.