Carlos Rosado: “Fuimos los pioneros en darnos cuenta del gancho turístico del cine”
Lo que comenzó siendo una idea poco más que extravagante hace unas dos décadas, se ha convertido hoy en una realidad inapelable: el cine es, no sólo una ventana por la que España se ha colado en el mundo, sino que los rodajes audiovisuales en nuestro territorio se han convertido en un factor estratégico de promoción, así como en un motor de crecimiento económico y creación de tejido empresarial.
El primero que habló de esto, “cuando nadie teníamos ni idea”, fue Carlos Rosado, recién reelegido presidente de la Spain Film Commission; y el hombre que, para conocimiento de los fans, ha logrado traer el rodaje de la popular serie Juego de Tronos a España.
Rosado, presidente y creador de la Andalucía Film Commission (AFC) allá por 1998, la primera de España, se dispone a celebrar, por tanto, los 18 años de existencia de la oficina de rodajes más antigua de España, una de las más importantes de Europa y pionera en nuestro país del aprovechamiento turístico del cine. La mayoría de edad la estrena con los mejores datos de su historia: Más de 1.200 rodajes en el último año, una facturación cercana a los 100 millones de euros y una creación de empleo directo de 16. 699 personas. Aún así, le queda energía para asegurar que “quedan muchas cosas por hacer”.
Me gustaría empezar haciendo balance. ¿Se veían en este punto hace 18 años, cuando se creó la AFC, con 1.210 rodajes en un año y una facturación de este volumen?
Hoy podemos decir que Andalucía tiene prestigio en el mundo, y por supuesto, en Europa y en España. Pero esto no es flor de un día. La Andalucía Film Commission fue una buena idea planteada a tiempo. Supimos ser innovadores abriendo nuevos campos. Hasta entonces, Andalucía había sido receptora de multitud de rodajes con una actitud pasiva por parte del territorio: los grandes productores venían pero aquí no se hacía nada... Y yo pensaba que todo eso, bien gestionado, podía ser rentable. Cuando se plantea en el Consejo de Administración de Canal Sur la creación de la AFC nadie tenía ni idea de qué estábamos hablando: responsables públicos de ningún nivel administrativo pero no en Andalucía, ¡en toda España!
¿Y cómo se echó a andar?
Me gustaba quedarme en el cine hasta los últimos títulos de créditos y me llamaba la atención que figuraran unas llamadas “Film offices”... A partir de eso que puede parecer una anécdota, Piluca Querol, hoy directora de la AFC, realizó un estudio en profundidad de la existencia y el funcionamiento de las oficinas de rodajes más importantes del mundo entonces: Nueva York, California..., creamos un plan sobre el papel y empezamos con unas herramientas muy básicas: un inventario de localizaciones, una guía de recursos con profesionales y empresas del sector para poner al servicio de los rodajes, etc... Y con ese poco material empezamos a viajar y a acudir a los mercados internacionales: Berlín, Cannes, el American Film Market de Los Ángeles. El primer año apalabramos 37 rodajes en estos mercados. Y así entramos en la industria.
Se cumplen 18 años de aquello y casi todos los últimos ejercicios han registrado muy buenos datos, a pesar de la recesión económica. 2014 se cerró con cifras idénticas a 2009, año anterior al inicio de la crisis. ¿Pero qué ha pasado en este 2015 para lograr romper el techo de volumen de rodajes y facturación?
Este año han pasado varias cosas. Pero principalmente se han recogido los frutos de 2014, y lo concreto en el ejemplo del rodaje de Éxodus, de Ridley Scott, en Almería: la superproducción más importante de los últimos 25 años en España. Un rodaje tan complejo y con tantas necesidades le dio mucha notoriedad y prestigio al destino, con lo cual, se ha producido un efecto llamada. Con Scott establecimos una relación muy estrecha años antes, cuando vino a rodar a Andalucía El reino de los cielos. Así que cuando nos enteramos de que buscaba localizaciones para Éxodus le invitamos, le ayudamos en las localizaciones, pusimos todos nuestros recursos a su disposición... Y todo ese trabajo se ha traducido después en números y en reputación. Es más: el productor ejecutivo de la película es el mismo de las dos primeras temporadas de Juego de Tronos, con lo cual se crearon unos vasos comunicantes que han situado a Andalucía en el mapa internacional de los grandes rodajes.
Quizás entonces el mérito no sea que vengan, sino que repitan. Repitió Ridley Scott y va a repetir Juego de Tronos, que acaba de anunciar que va a rodar en Andalucía su séptima temporada.va a repetir Juego de Tronos,
Eso es cierto, aunque quizás lo más valioso fue conseguir la quinta temporada de Juego de Tronos (GOT). En Andalucía recibieron todo tipo de asistencia y apoyos: de infraestructuras hoteleras, permisos de los ayuntamientos, Diputaciones, la Junta de Andalucía... Les salió bien desde el punto de vista técnico, se fueron satisfechos de nuestro asesoramiento para el Productor service local (Fresco Film)... Ahora de nuevo vuelven pero el trabajo ya estaba hecho y creadas las condiciones. Es un ejemplo muy gráfico del papel de la Andalucía Film Commission, jugamos un rol instrumental, ni producimos ni interferimos en la producción como entidad pública que somos, pero desarrollamos todo el trabajo de promoción y asistencia fundamental para que se den las mejores condiciones de rodaje.
Pero precisamente, casi se cae la visita de esa quinta temporada de GOT por falta de incentivos fiscales en España para rodajes internacionales... ¿Qué papel jugaron ahí para cambiar la legislación?
Fuimos muy insistentes en este tema. En 2015 me fui a ver al ministro de Hacienda. Y junto con nuestra insistencia, tengo que reconocer que él mismo entendió que estábamos perdiendo oportunidades de generar economía y empleo por no contar con una política de incentivos fiscales que existían ya en el resto de Europa para la atracción y captación de rodajes de cine internacionales.
Es curioso, pero el propio ministro me contó que en los datos de la EPA de 2014 (Encuesta de Población Activa) se notaba un descenso del paro en Andalucía en los meses que había durado el rodaje de Éxodus. Y así, se produjo algo muy importante: la modificación de la Ley del Impuesto de Sociedades en su artículo 36/2.... Nuestro incentivo fiscal no es el más potente, pero es competitivo y ya sólo tenemos una razón para que no vengan los rodajes: que no lo contemple o no lo permita el guión.
Y mirando ya dentro de nuestro país, ¿qué papel juega ahora mismo Andalucía en el sector nacional de la industria del cine?
Todo este trabajo nos ha colocado en una atalaya muy curiosa que, junto con todos los números y con las propiedades particulares del territorio, confluyen en algo mucho más importante: en Andalucía hay talento. Y al final, es lo que importa porque nos permite evitar la colonización cultural. Tenemos directores, guionistas, actores que cuentan historias universales, pero que interpretan la realidad desde los ojos de un andaluz. Y eso es muy importante. Se ha producido además un relevo generacional en los productores y directores, que ahora tienen vocación de competir fuera. Antes eran cautivos del mercado exclusivo que les proporcionaba Canal Sur. ¡Y saben inglés! Parecerá una tontería, pero es el primer paso para internacionalizarse...
En Andalucía tenemos a gente muy valiosa: gestores de drones, especialistas en animación, actores que ruedan en inglés sin necesidad de ser doblados, como Antonio de la Torre en El Infiltrado.... Y tenemos también una oficina de rodajes que ha servido de modelo para la creación del resto de las que existen en España, empezando por Madrid. No sólo somos referencia en el país, lo somos en Europa y en América Latina.
¿Qué hace falta entonces?
Hay grandes fragilidades financieras, eso sí. Falta músculo empresarial, pero eso no es una cuestión específicamente andaluza. Eso pasa en toda España, que la producción de cine depende en exceso de los mecanismos públicos y las televisiones privadas. Sin embargo, nos gana el talento: Éxodus contrata a María Valverde. Tenemos el ejemplo de Natalia de Molina... Ya de un tiempo a esta parte toda mi preocupación es que no solamente fuéramos extras. Nos preocupa tanto la propuesta como diversificar la oferta, y que las productoras internacionales contaran con el talento y con la industria local. Y eso lo hemos conseguido. Como anécdota contaré que una de las primeras producciones norteamericanas que llegaron gracias a la AFC a Andalucía, con Mira Sorvino como protagonista, fletó un charter con más de 100 profesionales de todo tipo. Pues cuando vieron lo que teníamos aquí, ¡los mandaron a todos de vuelta! El contacto con la industria local ha sido un logro muy importante.
Usted acuñó también un término hasta entonces desconocido: el turismo cinematográfico.
Tengo que decir sin rubor que la AFC ha sido pionera en España y en Europa en el aprovechamiento turístico del cine. El primer libro sobre cine y turismo que se publicó en Europa lo escribimos Piluca Querol y yo hace ya 10 años. A partir de ahí contamos con la complicidad de la Consejería de Turismo para desarrollar la que considero una de las claves de nuestro éxito: el cine y el turismo como estrategia de promoción de Andalucía en el mundo. Por esta vía hemos llegado a trabajar una serie de acciones como las Rutas de Cine, que tienen un doble efecto: descubrir el lugar y descubrir que Andalucía es escenario de rodajes. Todo eso que ahora parece tan sencillo se puso en valor desde la AFC.
De entre los rodajes más destacados que se recogen en la Memoria de Actividades de 2015, he visto sin duda mucha presencia española... Pero seguidamente, ¡¡a Bollywood!! Y hay otro caso peculiar: el de Japón. ¿Se está haciendo un trabajo de captación de nuevos mercados?
Acabamos de firmar un acuerdo con el presidente de los productores de Bollywood, el pasado mes de junio en Madrid, uno de los hitos más importantes también de este año de cara al futuro. La India produce una media de 1.500 películas al año, con audiencias millonarias; más que en Estados Unidos y más que en toda Europa. De ellas, el 10% se ruedan en el extranjero. Pues bien, España, gracias a ese convenio, se encuentran ya dentro de sus 10 destinos estratégicos. Hasta ahora hemos identificado el mercado indio, el chino y, aunque parezca obvio, el norteamericano. Puede parecer lo contrario, pero Estados Unidos no tenía interés en Andalucía, ni en España, por razones económicas (la falta de incentivos, la descompensación entre dólar y euro...). Al cambio de estas tendencias se le ha añadido el factor reputación, así como la alianza y generosidad de James Costos, embajador de Estados Unidos en España, que nos ha puesto en contacto con los principales productores americanos... Andalucía y España ya tienen prestigio en el mundo.
Y haciendo todo este repaso ¿se ha tocado techo o quedan cosas por hacer?
Tengo que decir que a Andalucía y a España les falta una estrategia común que asuma el liderazgo completo de esta entidad (la AFC). Un cambio de modelo que nos permita ser como la FILM FRANCE, una oficina pública en la que participan todas las instituciones públicas, con muchos recursos y una enorme rentabilidad. Nos deben escuchar porque a la vista está que ya no estamos hablando de teorías...
En el caso andaluz, buscamos un replanteamiento del modelo de la AFC, incrustada en un espacio donde converjan los grandes responsables de todos los aspectos que toca la Film Commission: la presidencia de la Junta de Andalucía, las consejerías, no sólo de Turismo y Cultura, sino Medio Ambiente, Fomento, Economía... El régimen local, con la Federación de Municipios y Provincias. Si Andalucía en materia de cine es hoy lo que es, ¿qué no podríamos ser con la energía y la potencia suficiente?
Y sin ser tan ambiciosos, ¿cuáles son los próximos pequeños pasos?
La mejor política es la continuidad: mejorando por supuesto, pero un trabajo continuista, no dar saltos sin estrategia. Queremos, primeramente, que la conmemoración de los 18 años de vida de la AFC sea otra oportunidad para crecer. Y generar la complicidad de la Junta de Andalucía y el Gobierno central para hacer de 2017 el año específico de los rodajes como factor estratégico de promoción de Andalucía en el mundo. Y tras eso, no parar de buscar propuestas innovadoras, nuevas oportunidades... Ahora hay una muy importante con la creación de un gran plató acuático, que podría estar ubicado en la provincia de Huelva. Hemos encargado un plan de viabilidad, pero creemos que daría mucho volumen de negocio: no existe ninguno importante en Europa, a excepción del caso de Malta, actualmente cerrado por reformas. Con esto va a pasar como con los drones: desde que existen, no hay película que no tenga escenas aéreas grabadas con estos aparatos. En fin, no sabemos qué va a pasar, pero hay que tener autoestima en esto, estar convencidos.