Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Los locales de ocio nocturno de Huesca y Zaragoza protestan contra el ‘cerrojazo’: “Se nos ha criminalizado”

La Plaza de los Fueros de Huesca aglutina varios locales de ocio nocturno.

Pablo Alvira Fuertes

0

Preocupación, inquietud y falta de previsión rodean los locales del ocio nocturno de Huesca y Zaragoza. Con la decisión tomada por parte del Gobierno de Aragón de volver a la fase 2 el pasado lunes, muchos dueños de estos establecimientos consideran que se les está señalando de forma injusta e innecesaria. No comprenden este “cerrojazo” cuando dentro de los bares se garantizan las medidas de seguridad, mientras en las terrazas y conciertos se están sucediendo más aglomeraciones. Señalan que fueron los primeros en cerrar las puertas el mes de marzo por voluntad propia, cuando la situación comenzaba a descontrolarse.

“Sentimos que se nos ha criminalizado de una forma que no corresponde. El 12 de marzo tomamos la decisión de cerrar porque no pintábamos nada con nuestra actividad. No esperábamos que fueran cuatro meses así, pero ahora que solo hemos abierto cinco bares en Huesca no creemos que cerrarlos vaya a mejorar la situación cuando se junta mucha más gente en otros lugares”, explica Carlos Bordonaba, responsable de El Palmar y La Cantina, dos locales situados en la Plaza de los Fueros. Con las medidas pertinentes ha tenido que reducir el aforo en ambos; en el primero pueden permanecer 36 personas y en el segundo 21.

Durante las tres semanas que ha podido abrir, asegura que el comportamiento de los clientes ha sido ejemplar. “El miedo que teníamos no era por lo que pudiera pasar dentro porque lo controlábamos bien. Era por la foto de fuera, que saliese algo en redes o en la prensa con gente apelotonada en la puerta pero se han portado de once. Han hecho colas y han respetado las distancias”, señala. Junto con este “jarro de agua fría”, Bordonaba asume que el año ya está perdido: “La semana de las fiestas de San Lorenzo supone un 35 o 40% del ingreso anual y además hemos cerrado cuatro meses. No quiero ponerme a hacer cuentas. Es un año que si conseguimos salvar el bar doy gracias. Tengo la sensación de que están haciendo como una especie de secuestro a nuestro negocio”.

Sin fechas ni plazos

Lo más alarmante para estos gerentes es que no hay plazos, no se sabe la fecha de una posible ‘vuelta al ruedo’. “Si te dicen quince días te planificas y lo asumes pero sin fecha para abrir es preocupante. Nadie nos está dando información, de esto nos enteramos a través de la prensa. Abrir un bar no es cojo la llave y cuando quiero lo cierro y me olvido. Es un trabajo diario: controlar caducidades, la higiene, el mantenimiento, los gastos y planes de vencimiento. Alguien no está pensando bien las cosas. Esto es como una película de Indiana Jones, a cada paso que das no sabes si te va a salir una flecha o te cae una roca. Es una lotería”, indica con impotencia.

En el caso de que detrás de esta medida haya otros motivos como las celebraciones por el ascenso de la Sociedad Deportiva Huesca a Primera División o para evitar concentraciones durante las fiestas, insiste Carlos Bordonaba en que lo asumiría aunque con resignación. Pero “lo que no se puede hacer es, sin ninguna explicación coherente, tras cuatro meses cerrados” y con el sueldo pendiente de sus trabajadores, “volver a cerrar cuando en ningún bar de ocio nocturno ha salido un rebrote”. La prioridad ahora para el oscense son sus camareros, solucionar sus contratos, y después revisar los productos para devolver lo que no haga falta. Sobre todo para que los pagos pendientes sean lo más bajos posibles y la carga de deudas sea menor.

Para poder reabrir, estos bares necesitaron hacer una nueva inversión, a veces del propio bolsillo del dueño y bastante amplia, para adecuar el establecimiento con medidas de higiene. Taburetes altos para estar en la barra, mesas, sofás hechos con palés, cojines, productos específicos de desinfección, un aumento de la cantidad de luz y formar a los trabajadores para contar con un establecimiento seguro. Son algunas de las cosas que ha tenido que incluir en sus locales.

En cuanto a las ayudas, recibió la prestación por el cese de actividad de autónomos y el Ayuntamiento de Huesca apoyó con el Plan Reactiva a los locales que lo pidieron y cumplían los requisitos, además de sumarse alguna entidad privada con pequeñas aportaciones. Con el futuro bastante incierto, Bordonaba asegura que una cosa así “no se afronta” y espera que el asunto se solucione con la mayor brevedad posible.

La situación en Zaragoza es más de lo mismo. El presidente de la Asociación de Cafés y Bares de la capital aragonesa, José María Marteles, consideró que esta fase ‘flexibilizada’ “impone unas condiciones excesivamente restrictivas sin justificación aparente”. Muchos de estos locales de ocio no podrán afrontarla con estos gastos, la mayoría de ellos se enfrenta a grandes deudas y será la puntilla para que cierren definitivamente. Y es que los gastos de estos establecimientos siguen siendo los mismos mientras ven reducido su aforo y sus clientes.

Desde la alcaldía de Zaragoza, Jorge Azcón expresó su punto de vista: “Por desgracia significará que un sector que lo pasaba mal lo pasará peor. Creo que habrá que hablar de ayudas y el Gobierno de Aragón tendrá que poner el debate encima de la mesa”. Sin embargo, el propio Azcón defendía la medida de retroceder de fase apostando por la prevención para adelantarse a problemas mayores.

Polémica por un anuncio ‘fake’

Un conocido bar zaragozano, El Parros, publicó un polémico anunció en su cuenta de Instagram donde invitaba a los jóvenes a viajar a Madrid y Salou por tan solo 25 euros para disfrutar de una noche de fiesta “huyendo del covid”. No obstante, los dueños del local ya anunciaron que surgió a modo de protesta por la injusticia -dicen- del cierre de los bares de ocio nocturno zaragozanos. La plataforma ‘Zaragoza de noche’ tuvo la iniciativa de este anuncio, que en algún caso se tomó al pie de la letra a pesar de indicarse que se trataba de una queja.  

Etiquetas
stats