Una asociación alerta del aumento “espectacular” de osos muertos en Asturias en los últimos años
El Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (FAPAS) ha alertado este martes ante el “incremento espectacular” de osos adultos muertos en el Principado en los últimos años, cuyos cuerpos han aparecido en ríos y caminos, entre otros lugares.
La denuncia de FAPAS se produce apenas diez días después de que fuera hallado un oso pardo muerto con un lazo ilegal de caza junto al río Degaña, entre las localidades de Cerredo y Degaña.
FAPAS asegura que muchas de esas muertes se han producido en circunstancias poco claras que hacen sospechar de actividades de furtivismo.
En un comunicado, advierte que solo cuando la aparición del cadáver de un oso adulto presenta evidentes indicios de que su muerte no ha sido natural, como portar una trampa enganchada al cuerpo, la gran mayoría de los sucesos se resuelven por parte del Gobierno de Asturias con una “lacónica justificación de accidentes, peleas o atropellos fortuitos como las causas más evidentes”.
Con esta actitud, según FAPAS, “cierra la posibilidad de iniciar investigaciones que permitan esclarecer, con mayor fortaleza, las posibles causas de las muertes de los osos”.
La asociación censura especialmente el número de ejemplares muertos durante la etapa de gobierno del socialista Adrián Barbón: “Mientras que en los siete años de legislatura del anterior presidente Javier Fernández se localizaron once osos muertos, en las dos posteriores legislaturas de Adrián Barbón se eleva ya el número de osos adultos muertos en tan solo seis años a 21”, señala en el escrito.
La gestión del medio natural
En los dos últimos años, la protección al oso pardo prácticamente ha sido eliminada, coincidiendo con la total desaparición de una unidad de gestión administrativa de la naturaleza en Asturias, expone.
“En esta legislatura, la gestión del medio natural se divide en dos Consejerías: Movilidad, Cooperación Local y Gestión de Emergencias (Espacios naturales protegidos y Servicio de Agentes Medioambientales) y Medio Rural y Política Agraria (Especies protegildas), lo que genera una descoordinación y desprotección sin precedentes políticos en la gestión de los recursos naturales de Asturias”, denuncia Fapas.
Fapas sostiene que durante estos dos últimos años, se ha batido el récord de osos muertos con un total de 10 ejemplares, de ellos, varios tras haber caído en trampas mortales para osos de gran tamaño.
“Este es un hecho que genera una gran preocupación ya que supone un antes y un después en materia de conservación del oso pardo; una especie que en los años 80 del siglo pasado estuvo al borde de la extinción y cuya recuperación ha sido un logro ambiental no solo en Asturias sino a nivel europeo”, señala.
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