Un Manifiesto sobre el Equipamiento y Aperturas de Vías en Pared inicia la recogida de firmas
Los conflictos entre la distinta ética de algunas vías que se abren en pared, con ética más deportiva (equipada) o clásica (libre o mixta libre/artificial) viene de lejos. La preocupación y las polémicas también, a veces agregando herramientas como el uso o no uso del taladro.
La última muestra de preocupación quiere adoptar la forma del debate y el consenso, y nunca de imposición, como respuesta a algunas aperturas de ética al menos discutible que surge “en un corto plazo de tiempo en la provincia de Huesca, de aperturas de nuevas vías de varios largos con determinado ”estilo“ caracterizado por, a nuestro entender, un excesivo equipamiento que desvirtúa los valores tradicionales de la escalada, máxime si estas vías se ubican en zonas tradicionalmente caracterizadas por un estilo mucho más limpio”. Así arranca el preámbulo del Manifiesto sobre el Equipamiento y Aperturas de Vías en Pared colgado en Change.org para conseguir firmas.
A la preocupación por que empiecen a proliferar vías sobreequipadas, sobre todo en zonas con estilo clásico definido, los promotores señalan que algunas de estas aperturas en ocasiones ha venido acompañada de acciones negativas como aproximaciones marcadas con espray, chapas pintadas en la pared o vías pisadas añadiendo seguros. Sin embargo, como recogen en el Manifiesto no son partidarios de los desequipamientos con carácter general, sino sólo en casos debidamente justificados.
Entre los promotores, que se reunieron en octubre de 2014 para comenzar a elaborarlo, se encuentran diversas generaciones de escaladores de pared como Óscar Palacios, Dani Acaso, Iker Madoz, Lorenzo Ortas, Chavi Raventós, Juan Corcuera, Adriano Cófreces, Unai Mendía, Olatz Fernández, Julen Urdangarín, Óscar San Martín, Nacho Merino, Rémi Thivel. Otros no pudieron asistir pero mostraron su opinión como Albert Salvadó, Mikel Zabalza, Cecilia Buil, Edu González, Carlos Garrido, y ya han firmado el manifiesto que, en una semana de vida en las redes sociales, está a punto de alcanzar 500 firmas. “No tenemos claro qué número empieza a ser representativo pero sí hemos de decir que estamos gratamente sorprendidos del ritmo de las adhesiones”, explican. Conseguir un consenso y una representatividad con el fin de tener voz propia ante las federaciones de montaña, la Administración, propietarios, ecologistas “que en los últimos tiempos obstaculizan la práctica de la escalada con restricciones y prohibiciones a menudo difíciles de entender”.
Por su interés reproducimos íntegro el Manifiesto y a continuación las preguntas que dirigimos a sus promotores para comprender algunas de sus aristas.
Manifiesto sobre el Equipamiento y Apertura de Vías en Pared
Teniendo en cuenta que este fenómeno no es aislado sino global y siguiendo las directrices establecidas para este mismo trabajo por la UIAA (Unión Internacional de Asociaciones Alpinas) se proponen las siguientes acciones:
1ª) Hacer pública desde los clubs de montaña, federaciones, Internet, refugios etc., una lista de lugares con paredes que, bien por su “recorrido histórico” o bien por su localización dentro de un espacio natural con restricciones, deberían respetarse e intentar escalar con el mínimo impacto posible.
Estos lugares se limitan, de momento, al ámbito “aragonés” y limítrofe cercano. La lista es amplia y no es cerrada: Cienfuens, Montrebei, Peña Montañesa, Turbón, Barranco de la Hoz, Órganos de Montoro y otras zonas o paredes aisladas donde el “estilo” de apertura sea similar. También y en general las zonas de alta montaña como podrían ser a modo de ejemplo: Ansabere, Midi d'Ossau, Ordesa, Vignemale, Maladeta, zona de Gavarnie, Balaitous, Aspe, Anayet o Foratata.
Se considera que las zonas de alta montaña en general (por encima de 1.500 metros de altura como orientación en los Pirineos) deberían preservarse para la escalada clásica. Entendiendo que pueden establecerse zonas de escalada deportiva o vías equipadas de pared en aquellas zonas cercanas a los valles o aquellas partes de la montaña de más fácil acceso siempre y cuando no haya algún tipo de restricciones.
En cuanto a las vías equipadas, o excesivamente equipadas, ya existentes en zonas de estilo clásico o de alta montaña se plantea en general respetarlas. No se está de acuerdo con los desequipamientos salvo casos debidamente justificados.
2ª) Hacer públicas también unas recomendaciones que buscan preservar la roca en su estado natural para la escalada clásica:
- No se deberían utilizar parabolts, químicos u otros anclajes fijos en donde exista posibilidad de usar piezas de autoprotección o seguros flotantes. No se considera negativo o perjudicial el uso de estos anclajes fijos en sí mismos; lo que se considera negativo es su uso donde no hacen falta o se da un uso excesivo.
- Se trata, en definitiva, de adaptar lo menos posible la montaña a nosotros sino de adaptarnos nosotros a ella. Es importante el componente psicológico de la escalada; el hecho de poder enfrentar nuestros miedos y asumir determinados riesgos. Entendemos todo esto como parte fundamental de la filosofía que rige la escalada, que entendemos es algo más que un deporte.
- Respetar el espacio entre vías para que se mantenga el compromiso original y la “libertad” entre las mismas.
- Respetar el estilo y la ética, traducido como “recorrido histórico”, de la escalada en cada una de las diferentes paredes.
- Preservar espacios para las futuras generaciones donde la evolución de la técnica les permita enfrentar sus propios retos donde ahora sólo es posible escalar abusando de los anclajes fijos en cuestión.
Conclusión
En las zonas de escalada clásica o aventura y en las zonas de alta montaña (salvo las excepciones mencionadas) se deberían abrir las vías considerando esta ética, estas normas básicas que se han pretendido definir en este manifiesto.
La importancia de este documento radica también en ayudar a evitar conflictos incitando a los escaladores a organizarse, antes que dejar que otros organismos estatales resuelvan los desacuerdos mediante prohibiciones.
Así mismo dicho documento tendrá relevancia si cuenta con el apoyo de la mayoría de escaladores y aperturistas de vías de pared independientemente del estilo o estilos que practiquen o prefieran.
Y a partir de este documento y del apoyo al mismo, se hace necesario tener interlocutores que representen a este colectivo y defiendan estos principios frente a Administraciones, propietarios, grupos ecologistas, etc. que en los últimos tiempos obstaculizan la práctica de la escalada con restricciones y prohibiciones a menudo difíciles de entender.
Seis dudas-clave sobre el Manifiesto
El manifiesto se muestra contrario en general a los desequipamientos, y especifica respetar lo hecho salvo casos debidamente justificados. ¿Podéis explicar un poco las razones y cómo se evaluaría “debidamente justificados”?
Creemos que debe existir la posibilidad de desequipar una vía en según qué casos flagrantes, algo que debería hacerse informando previamente al aperturista por si existiera otra mejor solución, explicando los motivos y no por interés personal con nocturnidad y alevosía.
Entendemos que es un tema muy delicado, a nadie nos gusta que nos desequipen una vía pero por otro lado entendemos que si una parte importante de la comunidad escaladora acordase unos criterios comunes y amplios a seguir en unos lugares todos deberíamos respetarlos en esos lugares.
Tal y como se dice en el Manifiesto “seguramente lo más bonito de la montaña es que no hay reglas y cada uno elige libremente su estilo” pero pensamos que puede ser positivo definir unos criterios.
Señala también que no se considera negativo el uso de anclajes fijos salvo si “no hacen falta” que se entiende por la posibilidad de autoprotegerse, o se da un uso excesivo. ¿Podríais comentar un poco más la consideración de “uso excesivo”?
Si no se puede colocar un seguro flotante o su emplazamiento es dudoso o poco evidente entendemos que puede estar justificado colocar un anclaje fijo. Si no existe esa posibilidad de asegurar en tramos en un terreno gris donde según la capacidad de cada escalador superar un nivel de exposición y dificultad, lo que para unos es excesivo para otros es insuficiente.
No pretendemos uniformar un estilo, cada uno llega hasta donde llega según su motivación y sus capacidades físicas y mentales. Sin embargo si entendemos que en una vía de escalada debe existir el riesgo de caída. Cada vía es distinta y lo que para uno es uso excesivo para otro no lo es, la intención es aplicar el sentido común y por eso mismo no creemos que nadie esté en posesión de la verdad sobre este asunto pero si se cumple que no existe riesgo de caída (nos referimos a la generalidad de la vía), si puedes elegir casi a cada paso entre escalar o acerar lo más probable es que estemos ante un caso de uso excesivo de anclajes fijos.
Y al hilo de lo anterior, ¿importa con qué se colocan, importa si es con taladro o a mano?
El medio de perforación no es lo importante sino el uso o el abuso que se hace de él. Como curiosidad te diré que la posibilidad de usar taladro con una mano mientras se escala y se abre reduce el número de expansiones. Lo importante es tener la mentalidad de taladrar lo menos posible.
En relación al espacio de la vías, se puede entender que podría haber cruce de vías si son del mismo estilo, pero lo que choca con este espíritu ¿sería que una vía de corte “deportivo” cruce con una vía de tipo de escalada libre de autoprotección o tradicional?
Si una vía nueva es de menos compromiso a la existente acercarse mucho a la vía existente va a afectar más y va a respetar menos la vía que se abrió primero. Si tienen similar estilo o es de mayor compromiso la nueva es más fácil que la vía más antigua se vea poco afectada por su nueva vía vecina.
Habría mil supuestos a contemplar y de nuevo nos remitimos al sentido común. Lo que entendemos con rotundidad que no se debe hacer es utilizar tramos de vía de otras vías ya existentes y añadir seguros fijos en esos tramos que la otra vía no tenía, eso es una pisada clara, un atropello a la vía existente.
La realidad es diversa y el objetivo no es definirlo todo pero sí definir unas buenas prácticas y actuar con respeto hacia otras vías ya existentes.
En relación al último párrafo, para algunos, publicar estos debates de ética entre escaladores puede acarrear que haya gestores ambientales que piensen que ya proliferan las chapas y la masificación y tome sus propias medidas sin tener en cuenta a los escaladores. ¿Creéis que pasa ahora o puede pasar en las zonas de las que habláis?
Nos preocupa que los debates sobre estos temas nos puedan dañar a todos y en eso es importante actuar todos con responsabilidad en lo que escribimos en la red, evitar los comentarios anónimos, dedicarnos más a escalar y menos a discutir pero también entendemos que vale la pena intentar que nos vayan mejor las cosas y para eso el camino es lograr un razonable consenso, poner sensatez y tener una representatividad.
¿Quiénes serían los interlocutores necesarios?
Si sentimos que hay un apoyo razonable al manifiesto nos organizaremos y nombraremos interlocutores, ahora mismo no hay interlocutores definidos.
Para leer el preámbulo íntegro y firmar el Manifiesto en Change.org, visita este enlace.