“Hay que avergonzarse de lo que hace la Unión Europea”
La Plataforma Castellano-Manchega de Apoyo a las Personas Refugiadas se ha manifestado brevemente en Toledo, para manifestar que “no hay nada que celebrar” este 9 de mayo, Día de Europa o de la “VergUEnza”. Así lo ha señalado Braulio Freyre, portavoz del movimiento que aglutina a diversos colectivos de carácter social de la región, entre los que se encuentra también la Coordinadora de ONGs, Comisiones Obreras, o los Colegios de Trabajo y Educación Social de la región, que ha criticado duramente el acuerdo alcanzado entre la Unión Europea y Turquía, el cual han calificado como una “respuesta vergonzosa” a la llegada de la población que huye de países como Siria, Iraq o Afganistán.
En este sentido, señalan que el acuerdo consolida las “devoluciones en calientes” que se han llevado a cabo en Melilla, mientras que se facilita el ingreso del país turco en la Unión Europea, “donde se suceden los ejemplos de retroceso de los valores democráticos y en la violación de los derechos humanos”, según afirmó el movimiento. “Hay falta de coherencia política”, aseguró Freyre, quien también criticó que no se cumpliesen los compromisos adoptados por la Unión Europea, lo que la aleja de sus valores fundacionales.
En este sentido, la Plataforma ha señalado la baja cantidad de refugiados que se han acogido en el territorio español, destacando y ha señalado que sus reivindicaciones no sólo se limitan a pedir la acogida de estas personas, sino que también piden la sensibilización y la preparación de la región y el país, de cara al asilo. El trato con Turquía, afirman, implica devolver a todas las personas que lleguen ilegalmente, en un trato que “consolida el fiasco” que supone la gestión de la crisis en el marco de la Unión Europea.
La Plataforma Castellano-Manchega de Apoyo a las Personas Refugiadas ha querido exigir así a la Unión Europea y a los gobiernos de los estados miembros la mejora en los programas de reasentamiento, así como la posibilidad de solicitar asilo en embajadas y consulados de terceros países y la concesión de visados humanitarios. En este sentido, exigen también vías “seguras” y la apertura de fronteras para quienes huyen de un conflicto bélico en el país o por causas causas económicas, políticas, sociales o medioambientales.
“En definitiva, exigimos y defendemos la protección de las personas y la garantía del disfrute efectivo de sus derechos humanos, que pasan ineludiblemente por el cumplimiento de la normativa internacional en materia de asilo”, concluía la Plataforma, que también exigía el cumplimiento de los convenios internacionales, así como las directivas y legislaciones europeas en materia de asilo y refugio. En resumen: “Garantizar una acogida digna y adecuada protección y cumplir los compromisos internacionales”.