Un tienda virtual para que mujeres emprendedoras del mundo rural vendan sus productos

“El futuro del medio rural pasa por la creación de más y mejores oportunidades laborales para las mujeres”. Así lo ha señalado la directora del Instituto de la Mujer y Para la Igualdad de Oportunidades, organismo autónomo adscrito al Ministerio de Sanidad. Según Lucia Cerón en las últimas décadas, la actividad de las mujeres del ámbito rural se ha desplazado desde la agricultura a otros sectores, principalmente al sector servicios, pero también ha habido un éxodo hacia zonas urbanas donde han encontrado mejores oportunidades laborales.

“Los datos son reveladores, en los municipios rurales el porcentaje de mujeres que trabajan en la agricultura respecto del total de ocupadas es del 6 o 7%, una tasa que disminuye a medida que aumenta el grado de ruralidad”, asegura Cerón. Ante esta situación, en 2015 el Gobierno central aprobó el primer plan especial para la ‘Promoción de las mujeres del medio rural’, que tiene vigencia hasta el año 2018, con el fin de dar respuesta a las necesidades específicas de este colectivo de mujeres y aumentar sus oportunidades de acceso a empleos de calidad, de participación en la vida social y política y en los ámbitos de decisión.

“En el marco de este plan hemos desarrollado el proyecto ‘Desafío Mujer Rural’, en colaboración con la Fundación EOI, un ambicioso programa destinado a fomentar el autoempleo y emprendimiento femenino y apoyar a aquellas mujeres que ya tiene una empresa o negocio. Entre las acciones puestas en marcha con este objetivo está la creación de la Plataforma de Comercio Electrónico, que actúa como tienda virtual en la que las interesadas pueden promocionar y vender sus productos”.

Esta plataforma se ha presentado el pasado día 20 de octubre en la localidad de Madridejos, en Toledo, y desde ese momento está plenamente operativa. “Es interesante aclarar que proporcionamos un servicio de tutorización para facilitar a las emprendedoras su utilización, incluyendo un sistema de transacciones económicas seguras”,

 

‘Desafío Mujer Rural’ presta servicio en todo el territorio del Estado y ,en la medida de lo posible, a todos los sectores económicos. Esta iniciativa permitirá a las emprendedoras rurales difundir y comercializar electrónicamente sus productos tanto en el ámbito nacional como internacional, además facilitará la interacción y la creación de redes profesionales entre las emprendedoras y la difusión de buenas prácticas empresariales.

“En en los últimos años el papel de las emprendedoras alcanza cada vez mayor protagonismo en la economía rural: el 54% de las personas que deciden emprender un negocio son mujeres, mientras que si hablamos del mundo urbano el porcentaje de empresarias desciende hasta el 30%. Casi ocho de cada diez, el 79%, de las empresarias rurales son autónomas”, explica la directora del Instituto de la Mujer, lo que refleja que el emprendimiento y el autoempleo es la opción que están eligiendo para permanecer en sus lugares de origen.

¿Quién puede utilizar esta plataforma?

La plataforma está disponible para todas las mujeres que viven en el medio rural, que tengan interés en comercializar y distribuir sus productos aprovechando el potencial de la tecnología y que cumplan los requisitos. El objetivo inicial es alcanzar unas 250 usuarias, “cifra que esperamos se incremente progresivamente. En una semana escasa ya hay más de diez empresas ofreciendo sus productos y otras 50 están realizando las gestiones técnicas para figurar”. Los productos o servicios deben ser ofertados por autónomas, empresas, sociedades cooperativas o comunidades de bienes de hasta 50 trabajadoras y trabajadores, cuyo inicio haya sido el emprendimiento y se desarrolle en el ámbito rural.

Estas entidades deberán cumplir requisitos generales como que la iniciativa esté a cargo de una mujer, y si es una sociedad que la participación mayoritaria también sea de mujeres; tienen que estar legalmente constituidas e inscritas en el Registro Público, cuando esto sea necesario; deberán estar al corriente de pago de las obligaciones tributarias y con la Seguridad Social; y si son sociedades, deberán promover la presencia equilibrada de mujeres y hombres en la plantilla, incluyendo los puestos de responsabilidad.