No hay un plan de realojo concreto para el asentamiento chabolista de Toledo
Un día antes de que el desalojo de los habitantes del asentamiento chabolista ‘El Cavero’ en la localidad toledana de Olías del Rey, la Junta de Comunidades anunció que ofrecerían 1.800 euros a cada una de las familias, 47 en total, para alquilar una casa. El portavoz del Gobierno señaló que es una opción “quizás más adecuada” y ha defendido la Junta, señalando que quienes han criticado su labor han sido “injustos e irresponsables”. Hernando ha asegurado que el Gobierno ha intentado buscar una “solución digna”.
Por su parte, la consejera de Fomento, Elena de la Cruz ha vuelto a puntualizar que es el Gobierno de España el que “está desahuciando” y ha asegurado que se ayudará a todos los ciudadanos, pero “no puede ser que quien crea el problema, nos quiera echar la culpa”. La líder de la cartera de Fomento ha señalado también que la mayoría de las viviendas sociales de Castilla-La Mancha están ocupadas y que no se puede “echar familia a la calle”, ya que hay una lista “muy extensa de demandantes de viviendas”.
Sin embargo, el resto de los implicados no están, en ningún caso, satisfechos con la medida anunciada por el Gobierno regional. El abogado de las casi cincuenta familias del asentamiento, Ángel Benito Pérez, ha señalizado que la oferta de la Junta de Comunidades es un “parche” que no llega a resolver el problema de las personas, ya que no tendrán un “techo para cobijarse”, después del desalojo, según declaró a Europa Press. Además, Benito ha señalado que no sabe si el ingreso se producirá de forma automática el jueves, pero que sí serán 300 euros mensuales durante seis meses.
La Asociación Socioeducativa Llere, que recibió 35.000 euros para ayudar en el realojo de las familias, ha señalado que “no hay realojo de ningún tipo”, ya que la solución se limita a unas ayudas para alquilar la vivienda, pero que las familias deben abandonar su casa a partir del jueves. Si bien señalan que el ayuntamiento de Olías del Rey ha articulado un dispositivo de emergencia, pero sólo para dos o tres días, pero que luego tendrán que buscar “cada uno su ubicación”. La Asociación señala que el proyecto planteado de reintegración era, prácticamente imposible, por lo que han sido necesarias las medidas necesarias del Gobierno, pero que sí les consta que hay una intención de la Administración de dar continuidad al seguimiento de las familias.
La Asociación señala que los niños abandonarán el asentamiento antes de producirse el desalojo, para evitar que, en caso de haber algún tipo de problemas, sufran en el proceso. Por otro lado, señalan también que muchos de los escolares han dejado de ir al colegio debido a la situación “bastante tensa” que se vive en ‘El Cavero’, por lo que la educación se ha visto relegada. El Ayuntamiento de Toledo ha puesto un autobús para que los niños abandonen la zona antes del desalojo. Además, ahora mismo quienes se dedican al chatarreo tienen sus furgonetas llenas de sus cosas, debido al desalojo.
Finalmente, desde Podemos, José García Molina, secretario general de la formación, ha señalado que su valoración del proceso no puede ser positiva. El parlamentario también ha comentado que no hay un proceso de realojo “como tal”, y ha lamentado que se dejase de lado la solución integral, de vivienda, empleo y reintegración escolar, que ha propuesto Podemos desde sus inicios. “Apenas se nos han comunicado las medidas que se van a tomar, hay mucha falta de información”, señala García Molina. Desde Podemos tampoco saben si la oferta de compra de los terrenos se produjo o no, porque la Delegación de Gobierno ha afirmado y luego desmentido la oferta por parte de la Junta de Comunidades.
En este sentido, el parlamentario ha lamentado que se “sobrepongan” los colores políticos por encima de las personas. “Parece que si las posturas son diferentes, las personas pasan a segundo plano”, comenta el diputado. Además, ha señalado que se planteó la posibilidad de instalar casas prefabricadas en ‘El Cavero’, para que el desalojo se pudiese llevar con más tiempo. Con esto, señala, se podría haber acompañado el proceso con un plan de empleo y de integración escolar para los niños. “Me parece que ha primado más el criterio político”, concluye García Molina.