Ya son siete los accidentes laborales en Castilla-La Mancha en una semana
Un trabajador de 38 años de edad ha resultado herido este miércoles con diversos traumatismos al precipitarse desde unos seis metros de altura tras ceder un techo de uralita en la calle Cardenal Monescillo de Ciudad Real.
Según han informado a Europa Press fuentes del Servicio de Atención y Coordinación a Urgencias y Emergencias 112 de Castilla-La Mancha, los hechos han tenido lugar sobre las 11.00 horas.
Poco después, poco antes de las 13 horas, en Oropesa (Toledo), un bombero resultaba herido al ser golpeado por un objeto cuando trabajaba en la extinción de incendio en local comercial.
Son el sexto y séptimo accidente laboral, respectivamente, en apenas una semana en la región. Ayer, dos trabajadores de una empresa de limpieza de alcantarillado resultaban heridos tras sufrir quemaduras cuando manipulaban alcohol en San Clemente (Cuenca). Los heridos fueron un hombre de 59 años, que ha sido trasladado por una ambulancia de Soporte Vital Básico al Hospital de Villarrobledo, y otro hombre de 50 años trasladado por una UVI al Hospital de Albacete. En el operativo ha participado también la Guardia Civil y la Policía Local.
El lunes un hombre de 44 años era trasladado al hospital Virgen de la Salud de Toledo con heridas provocadas por un producto químico cuando trabajaba en la fábrica de Schweppes de la capital, ubicada en la calle Río Ventalomar de la capital regional. El trabajador sufría quemaduras en diversas partes de su cuerpo.
Además, el pasado día 15 una trabajadora fallecía mientras realizaba labores en un cuadro eléctrico en la localidad de Peñalagos, en Guadalajara y resultar electrocutada. Ese mismo día, un hombre de 41 años de edad fue trasladado al hospital de Ciudad Real tras sufrir quemaduras en los ojos por caída de sosa cáustica cuando trabajaba. Ocurría en una empresa vinícola de Daimiel ubicada en la carretera de Las Tablas.
El día anterior, un hombre de 55 años fue trasladado al Hospital de Albacete tras precipitarse de una altura de unos cinco metros mientras quitaba la nieve del tejado de un taller, situado en la calle Toledo del polígono industrial Camporosso de Chinchilla de Montearagón (Albacete), subido en un toro mecánico.
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