La arquitectura de Castilla-La Mancha reivindica en sus premios bienales su vocación de servicio público

El Museo Paleontológico de Cuenca ha sido el escenario en el que los arquitectos de Castilla-La Mancha han vuelto a sellar una unión de fuerzas que ha cristalizado en su segunda gala de entrega de premios bienales, una cita en la que han alzado la voz en defensa del sector y que ha servido para poner broches de excelencia a los premiados en ocho categorías de hasta 94 propuestas recibidas por parte de toda la profesión.

La decana de los arquitectos de Castilla-La Mancha, Elena Guijarro, ha abierto fuego en la gala para reivindicar el sector y sus nuevas vertientes, poniendo en valor que en cuanto a los premios se han introducido nuevas categorías.

Cine, montajes escénicos o montajes de exposiciones son nuevas disciplinas de una profesión que se diversifica que ahora, tal y como ha defendido desde la tribuna de oradores, también se quieren premiar. Igualmente, se ha introducido la categoría 'Permanencia' para valorar los trabajos pasados y que perduran; así como la nueva distinción por toda una trayectoria, que se estrena en esta edición.

Arquitectura para “garantizar equilibrios”

Tras la entrega de una veintena de diplomas, la presidenta del Consejo Superior de Colegios de Arquitectos de España, Marta Vall-llossera, ha señalado que reconocer la arquitectura y el buen urbanismo es “reconocer su capacidad para mejorar la calidad de vida de las personas”, pero también “poner en valor su apuesta por la sostenibilidad y por garantizar equilibrios”.

Un sector que también “genera sentimiento de arraigo y pertenencia” también en el paisaje y en el entorno que “desde la infancia, cada uno, recuerda y estima”. “El arquitecto tiene un papel clave, que es hacer felices a las personas que habitan los edificios que construyen”, ha apuntado.

En el acto ha habido tiempo para reivindicar la recuperación de estos premios hace dos años, que volvieron para reconocer la labor y el compromiso de los arquitectos en la ciudad. Casi 100 proyectos de los que 12 fueron premiados acaban recogidos en esta entrega que será la primera de muchas, ya que nación con vocación de continuidad.

La decana de los arquitectos, Elena Guijarro, como anfitriona, ha tomado la palabra en el primero de los actos para presentar este libro, del que ha dicho que su carácter bienal le dará “más calidad”.

De este modo, el ciclo empezará con la entrega de premios para el año siguiente presentar la publicación, y de forma alterna continuará este recorrido, así que será en 2025 cuando salga la publicación de los premios de esta edición.

Esta publicación, ha dicho, cuenta con apartados donde se plasma “una visión particular” de cada una de las obras aportada por sus propios autores. “Ha quedado estupenda y espero que lo valoren y lo puedan disfrutar”, ha dicho Guijarro dirigiéndose al público.

30.000 atenciones directas para rehabilitar viviendas

El vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, ha ejercido la portavocía de la representación institucional en el acto para poner en valor el trabajo de los arquitectos del pasado que “modelaron las vistas de Cuenca”, escenario del evento, para disfrutarlas ahora.

En colaboración con el sector, se buscó la colaboración de arquitectos y aparejadores para conseguir “doce oficinas de rehabilitación en Castilla-La Mancha” para informar, asesorar y “ayudar a mucha gente a poder presentar sus proyectos para rehabilitar viviendas y bloques de viviendas”:

“El resultado es muy bueno, casi 30.000 personas atendidas, informadas y ayudadas para presentar sus expedientes”, ha avanzado Martínez Guijarro, quien ha dicho en este punto que se han conseguido incrementar los fondos hasta los 215 millones de euros de cara a impulsar estas rehabilitación.

Con todo, ha pedido “respetar la herencia” de la arquitectura recibida, pero también dejar una herencia propia, para lo cual ha pedido a los arquitectos “lealtad institucional” para sacar adelante “los mejores proyectos” en cada una de las ciudades.

Galardones

Las propuestas premiadas por el jurado de la II Edición de los Premios de Arquitectura y Urbanismo de Castilla-La Mancha en cada una de las ocho categorías, son, en la Categoría 1, que distingue Obra Nueva Vivienda, el premio ha sido para 'Casa de Campo' en Zafra de Záncara (Cuenca), obra de Estudio Canobardin.

En Obra Nueva Otros Usos, el premio ha sido para los 'Alojamientos de turismo rural Dehesa Boyal' en Mariana (Cuenca) una obra de G+A Arquitectura ex aequo, junto a otros dos proyectos: la 'Sala velatorio municipal en Casas de Lázaro', en Albacete, obra de Fernando Valenciano, y el 'Gimnasio Municipal' en Corral de Calatrava (Ciudad Real) obra de Luis Carlos Peña.

En el epígrafe Arquitectura Rehabilitación, el premio ha sido para la 'Rehabilitación de una Casa-Carbonería' del siglo XVII en Toledo, obra de Joaquín Vargas, y Mención especial se ha llevado la 'Casa Reminiscente' en Oropesa (Toledo).

En la Categoría 2, el premio de Urbanismo y Paisaje, ha premiado, en el epígrafe Territorio, a la 'Agenda Urbana Talavera de la Reina 2030', en Toledo. En el epígrafe de Paisaje urbano, el premio se lo ha llevado 'El Plan Director y sus primeras obras en la Muralla de Talavera de la Reina' (Toledo), obra de Fernando Cobos, Rodrigo Canal e Iris Oliveros (de Fernando Cobos Estudio de Arquitectura).

En la Categoría 3, el premio Emergente para arquitectos menores de 40 años, en el epígrafe de Obra Nueva, ha sido para 'CEI Amapola' en Galápagos (Guadalajara) obra de OCA Arquitectos (Bernardo García y Hernán Lleida). En el epígrafe de Rehabilitación, el premio se lo lleva la 'Casa de la Sevillana' en Sisante (Cuenca) de Ana González Cabrera y Noa González Cabrera.

En la Categoría 4, para arquitectos colegiados con obra fuera de Castilla La Mancha, el Premio Miguel Fisac se lo llevan '4 Viviendas de Protección Oficial', en Garralda (Navarra), obra de Nazareth Gutiérrez, Rodrigo Núñez y Juan Carrascosa.

La Categoría 5, donde figura el premio a la Difusión de la Arquitectura, ha premiado a 'NAM. Navegando Arquitecturas de Mujer', una app para la difusión de arquitecturas olvidadas, obra de María Elia Gutiérrez y su equipo (José Parra, Ana Gilsanz y Asunción Díaz). Mención especial se lleva el trabajo realizado por David García-Manzanares Vázquez de Agredos 'Miguel Fisac. Obra completa'.

La Categoría 6, de nueva creación, que premia la Permanencia Obra Nueva es para el 'Edificio del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Albacete', obra de Francisco Candel y de Juan Caballero. En el epígrafe de Rehabilitación, el premio se lo lleva la 'Rehabilitación del Teatro Circo de Albacete', una obra de Juan Caballero, Emilio Sánchez y Carlos Campos.

En la Categoría 7, el premio a la Diversificación Profesional ha sido para el 'Montaje expositivo para la efeméride del VIII Centenario del nacimiento de Alfonso X el Sabio' en Toledo, una obra de AMA Estudio Arquitectura, compuesto por Francisco Javier Alguacil y Luis Moreno. Mención especial se lleva 'Cacahuete' en Sacedón (Guadalajara), de Fernando Orte y Cristina Manene.

Alberto Campo, distinción de honor

El vallisoletano Alberto Campo ha brillado especialmente con la distinción de honor a toda una trayectoria, aunque desde la modestia ha considerado que hay profesionales “mejores” que él.

Quien fuera catedrático de Proyectos de la Escuela de Arquitectura de Madrid de 1986 a 2017 y profesor en la ETH Zürich, además de docente en Lausanne Dublín, Ithaca, París, Nápoles, Kansas y Washington, ha agradecido la generosidad del jurado.

Entre bromas, ha reivindicado la arquitectura más allá de su función primigenia, apuntando, por ejemplo, que incluso la artista Aitana ha grabado un videoclip encima de su casa.