Munté deja para el trámite parlamentario las discrepancias con ERC y CUP sobre el IRPF
“Un debate más mediático que otra cosa”. Así ha definido la consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Neus Munté, las discrepancias entre Convergència y Esquerra sobre la subida del IRPF a las rentas más altas que compense la bajada del impuesto sobre las más bajas. En la rueda de prensa semanal posterior a la reunión del Consell Executiu, Munté ha pasado de puntillas sobre el debate sobre la progresividad del sistema fiscal catalán que pide la CUP, y ha asegurado que “el problema no es de fiscalidad, es del sistema de financiación”.
Como ya avanzaron desde ERC, Munté ha dejado el debate tributario en manos del Parlament, ya que el proyecto de presupuestos y de ley de medidas fiscales que salga del Govern no incorporará cambios de calado en el IRPF, ni tampoco en otros impuestos como sucesiones ni donaciones ni patrimonio. “Es un escenario en el que todavía no estamos, ahora tenemos que cerrar el anteproyecto de ley”, ha sostenido Munté, que ha dicho “ser consciente” de la “presión fiscal elevada” de los catalanes.
Munté también ha querido enviar un mensaje de buena voluntad a la CUP, el socio prioritario de Junts pel Sí para aprobar las cuentas. “Compartimos con la CUP el objetivo de una estructura tributaria justa y equitativa y de mayor eficacia en la lucha contra el fraude fiscal”, ha dicho la portavoz, que ha avisado a los cupaires de que tendrán que negociar unas cuentas “realistas”.
En cualquier caso, Munté ha insistido en que las discrepancias no desembocarán en un adelanto electoral. “No planteamos otro escenario que no sea la aprobación de los presupuestos”, ha zanjado. Las malas perspectivas electorales de Convergència, a quien las últimas encuestas sitúan por debajo de los 30 escaños, no aconsejan adelantar elecciones.