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Doro Balaguer, pintor de vanguardia y político valencianista, muere a los 85 años

Doro Balaguer ante una de sus obras.

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Doro Balaguer ha muerto este domingo sin hacer ruido, con la modestia con la que actuó toda la vida. Isidor Balaguer Sanchis había nacido en Valencia en 1931, en una familia de comerciantes y con un padre activo en el mundo cultural de la ciudad. Estudió Bellas Artes y se fue a París en los años cincuenta, como tantos otros artistas de su época, en busca de aliento para sus ansias se renovación. Miembro ya del Partido Comunista, vio truncada su estancia en París al retirarle la policía franquista el pasaporte.

Integrado en el Grupo Parpalló, colectivo que centró la irrupción de los lenguajes de las vanguardias artísticas en la Valencia de los años sesenta, acabó abandonando la pintura para centrarse en la política. Como dirigente, participó en la constitución del Partit Comunista del País Valencià, formación en la que fue uno de los líderes de su ala más renovadora y más valencianista.

Precisamente sus posiciones en ese ámbito le llevaron, junto a un grupo de militantes, a abandonar el PCPV y participar en la creación del Agrupament d'Esquerra del País Valencià, que a comienzos de los años 80 dio pie a la formación de Unitat del Poble Valencià, partido valencianista que evolucionaría con el tiempo hacia el actual Bloc, integrado en Compromís.

Nunca, ni cuando escribió sus memorias, quiso hacer exhibición de su condición de represaliado por el franquismo (fue detenido y sufrió torturas), ni reclamó compensación alguna por haber sacrificado su carrera artística en buena medida por ello. En 2011, tras unos años en los que recuperó la práctica de la pintura una vez se jubiló del trabajo al frente del negocio familiar, Doro Balaguer protagonizó una amplia exposición en la Fundació Chirivella Soriano, gracias a la cual muchos descubrieron a un artista de gran modernidad, con una notable capacidad de reflexión sobre el sentido del arte y sus limitaciones.

Autor de varios libros, Doro Balaguer fue un gran recuperador de la obra de Josep Renau, el gran fotomontador valenciano que el franquismo había sumido en el olvido por su militancia comunista. En 2001 recibió la medalla de la Universitat de València por su contribución a las libertades y la democracia.

 

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