De esqueleto de cemento a contenedor cultural: así es el nuevo Caixaforum de Valencia

Una década después de su construcción, el Ágora de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia tendrá contenido. La fundación La Caixa ha presentado este miércoles su proyecto para el Caixaforum de la capital valenciana, que aspira a ser un motor cultural en la ciudad y abrirá sus puertas el próximo 22 de junio.

La programación conjuga “pasado, presente y futuro” con tres exposiciones: Faraón. Rey de Egipto, Horizonte y límite. Visiones del paisaje, y la experiencia inmersiva 'La nube', que se nutre de la inteligencia artificial. La idea es tener una programación renovada cada tres meses para dinamizar la ciudad, según ha indicado la directora general adjunta de la Fundación La Caixa, Elisa Durán, acompañada por el director corporativo de Cultura y Ciencia, Ignasi Miró; el director corporativo de Educación y Marketing, Xavier Bertolín, y el director de Caixaforum València, Álvaro Borrás. La inauguración del contenedor cultural vendrá acompañada de una jornada de puertas abiertas que durará hasta el 30 de junio para abrir el esqueleto del Ágora al público y exponer la revisión que el arquitecto Enric Ruiz-Geli ha realizado de la estructura de Santiago Calatrava, partiendo de una conferencia que exhiba sus intestinos.

Con una inversión superior a los 19 millones de euros y un presupuesto anual de 5 millones para mantenimiento y programación, el centro cultural contará para sus exposiciones con fondos artísticos del British Museum, el Museo Nacional del Prado, el Reina Sofía o el Museo de Arte e Historia de Ginebra. Los responsables hacen especial hincapié en que su ambición no es engrosar una estadística de visitas, sino fidelizar a un público que ya siente atracción por el arte y al público especializado. Así, aseguran, no realizarán acciones comerciales para atraer turistas, pese a su ubicación en uno de los puntos más visitados de la ciudad, en el que aspiran al medio millón de personas a partir de su segundo año de apertura.

La sala grande de exposiciones estará consagrada al antiguo Egipto gracias a la alianza con el museo británico. La muestra Faraón. Rey de Egipto, compuesta por 140 piezas, “explorará el simbolismo y el ideario de la monarquía egipcia desvelando las historias que encierran como representación de esta antigua civilización”. Rompiendo la dinámica que el Caixaforum proyecta, con cambios cada tres meses, esta muestra se mantendrá hasta enero de 2023.

La sala dos albergará Horizonte y límite. Visiones del paisaje , que toma como base la colección de arte contemporáneo de la Fundación La Caixa “para profundizar en el modo en que la creación del paisaje ha determinado nuestra percepción de la naturaleza a lo largo de los últimos siglos”. Esta muestra cuenta con obras de Gustave Courbet, Joan Miró, Ramon Casas, Tacita Dean, Sophie Ristelhueber, Bleda & Rosa, Cristina Lucas, Victoria Civera, Perejaume y Hermen Anglada Camarasa.

La tercera sala será el lugar para uno de los proyectos educativos más ambiciosos de la fundación: la experiencia inmersiva #LaNube{IA}. La actividad propone un recorrido para experimentar y debatir sobre la aplicación de la inteligencia artificial en los procesos de aprendizaje. Los visitantes interactuarán con seis proyectos de investigación punteros sobre aplicaciones de educación basadas en inteligencia artificial liderados por las universidades de Memphis, Carnegie Mellon, Melbourne, el Instituto de Investigación en Inteligencia Artificial (IIIA) del CSIC, la Universidad Pompeu Fabra y Starlab-Neuroelectrics.

La fundación pretende exprimir su ubicación y durante el verano plantea una serie de actuaciones culturales en el exterior del Ágora. La agenda de espectáculos, que arrancará el día 22 y se prolongará cada sábado, consta de interpretaciones musicales, poesía y cine. El proyecto, que “respeta, potencia y convive con el Ágora manteniendo su concepto original como espacio de reflexión”, tendrá dos salas de exposiciones, un auditorio con capacidad para unas 300 personas, librería, restaurante y un espacio familiar y educativo, con un total de 8.200 metros cuadrados útiles sobre los 9.900 construidos.