Inconformismo en El Musical
Performance, duetos musicales arriesgados, ciclos reivindicativos. La programación realizada hasta ahora por el Teatre El Musical de Valencia ha estado caracterizada por no ser nada convencional, por atreverse con espectáculos de carácter rompedor. Y la oferta que ofrece este fin de semana va en la misma dirección.
'Mi gran obra', del ilicitano David Espinosa, y 'Biblioteca de cordes i nusos', del castellonense José Antonio Portillo, son los dos espectáculos irreverentes que acoge el teatro de El Cabanyal. De hecho, ambas obras estarán limitadas a solo 20 y 35 espectadores, respectivamente.
La obra de Espinós nace con la premisa de hacer una función de teatro grandiosa, sin límite de presupuesto alguno. Que haya más de 300 actores, animales, un helicóptero o una banda de rock -todos a pequeña escala- es la muestra de ese pensamiento a lo grande que inspira la obra. La actuación destaca por contener una gran visualidad, ya que el público observa cómo el autor ha creado y animado en vivo. Todo, con un espectáculo de música e imagen que forman un retrato social lleno de ironía. Las dimensiones de la función obligan a que el público que pueda acudir sea reducido.
La 'Biblioteca de cordes i nusos' es una estructura circular de madera que se instalará este sábado y que permanecerá hasta el domingo 27 en el vestíbulo de El Musical. La biblioteca estará compuesta por objetos e historias, creadas especialmente por niños, y que invitan al espectador a interaccionar. La obra hace 13 años que se puso en marcha y esta es la primera vez que se instala en Valencia. Anteriormente ha pasado por ciudades como Lisboa, Barcelona, Madrid, Londres, Praga o Bilbao.
