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Mamen Peris, candidata de Ciudadanos a la Generalitat: “El PP está jugando con transfuguismo, eso es corrupción institucional”

Mamen Peris, candidata de Ciudadanos a la presidencia de la Generalitat.

Laura Martínez

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Mamen Peris (Alboraia, 1971) es licenciada en derecho y abogada en ejercicio desde 1991. Es también la sexta portavoz de Ciudadanos en la Comunitat Valenciana en dos legislaturas y su candidata a la Presidencia de la Generalitat. Asumió la portavocía del grupo parlamentario el pasado enero, tras la marcha de Ruth Merino quien, como Toni Cantó, pasó a engrosar las filas del PP. Antes de ser diputada autonómica pasó por la Diputación de Valencia y fue concejala en Alboraia por un partido local. Ahora tiene el reto de conseguir que Ciudadanos llegue al 5% del lsitón electoral, una cifra que ninguna encuesta vaticina.

¿Cómo afronta esta campaña electoral?

Con muchísima ilusión. Estoy encantada. Me encanta ir municipio a municipio. Veo cariño, gente que se suma, afronto una campaña en la que hemos sumado a perfiles de la sociedad civil; eso es volver a la esencia de Ciudadanos.

La legislatura arrancó ya de forma convulsa. ¿Cómo ha visto este periodo?

La DANA, la pandemia, la guerra... Hemos tenido saltos que nos han trastocado. Incluso a nivel político, los titulares cambiaban completamente de una semana a otra, con líderes que parecían mitos que caían. He vivido una legislatura en la que lamentablemente también he tenido compañeros de viaje que no han aguantado hasta el final, pero ahora están donde tienen que estar: lejos de este proyecto. Ahora me siento a gusto porque se ha quedado la gente que quiere trabajar por este proyecto liberal, de centro, progresista y necesario para la Comunitat Valenciana.

Es usted la sexta portavoz en ocho años. ¿Cuándo entró en Ciudadanos se imaginaba esto?

En absoluto.

¿Y qué expectativas tenía?

Cuando entré en Ciudadanos venía de un partido local que habíamos creado justamente para trabajar por nuestro municipio. Soy muy municipalista y siempre he apostado por que esto fuera la base del partido. Un partido que no tenga su mirada en el día a día, en el trabajo de los concejales o en la política de proximidad se pierde mucho. Siempre digo que un político que no ha pasado por ser concejal no sabe lo que se pierde, se nota distinto a la hora de pactar o consensuar leyes. No esperaba acabar como candidata a la presidencia de la Generalitat, pero la vida da muchas vueltas y ahora estoy ahí, con ilusión, valentía y un pálpito claro sobre que a esto le vamos a dar la vuelta. Son esas intuiciones que a menudo tenemos las mujeres.

Es usted la única candidata entre los seis partidos con representación.

Este es el único partido que ha roto el techo de cristal de verdad. Creo que una mujer hoy en la Generalitat Valenciana sería fundamental. Las mujeres tenemos una capacidad de organización brutal y tenemos un sexto sentido, somos intuitivas, nos gusta consensuar, somos muy cartesianas porque tenemos que ir organizándolo todo y creo que es muy positivo. También por mi profesión [abogada], en la que muchas veces tenemos que consensuar en materia de familias, de herencias , cuestiones en las que entran los sentimientos... con las mujeres llegamos antes a acuerdos que con los hombres.

Entró en las Corts Valencianes tras las elecciones de 2019, aunque venía de la Diputación de Valencia, cuando el resultado de Ciudadanos fue significativo en el parlamento autonómico -obtuvo 18 diputados- y a nivel nacional. ¿Imaginaba que el partido pudiera terminar como ha terminado ahora, con tantas marchas de diputados, cambios en la portavocía...?

Cuando entré en 2019 creo que arrastrábamos un boom de la propia marca y de Albert Rivera, eso era un poco ficticio. Creo que la razón de un partido de centro liberal que se precie no es tener 18 diputados, es tener menos diputados pero ser decisivos en los gobiernos. Nuestra política ha de ser no de los extremos al centro; todo lo contrario, nosotros estamos llamados para ensanchar este centro. Empecé a ver las cosas distintas cuando se marchó Toni Cantó. En ese momento me salió, y lo mantengo: Goya a la mejor interpretación. Nos había tomado el pelo a todos los valencianos y estaba buscando una salida al PP. Es legítimo, sí, cada uno se va, pero hay muchas formas de hacerlo sin engañar.

Después había gente que estaba aquí pero no era de aquí. Hasta que no se han ido todos los que se tenían que ir... Si hubiera ido a un notario o hubiera hecho un acta no me hubiera equivocado sobre quienes eran las personas que iban a abandonar el barco, es algo que tengo clarísimo. Hay gente que lo que ha buscado son sillones, tener puestos y han planteado excusas ideológicas. El PP estaba al mismo tiempo que Ciudadanos, no sé por qué en ese momento no optaron por el PP. Es cierto que ser de centro es muy difícil: desde la óptica de la derecha eres de izquierdas y desde la izquierda eres facha. Comprender esa política moderada y sensata es algo que mucha gente, como está en los bloques ideológicos, no puede hacer.

¿Por qué cree que las personas que han abandonado Ciudadanos lo han hecho para irse al PP?

Tal vez porque no eran auténticos liberales.

Usted ha sido muy dura con su candidato y presidente, Carlos Mazón ¿Cree que el PP buscaba a esos cargos?

Yo seré dura con quién se burle de la corrupción. Acabamos de ver que le piden siete años de prisión al alcalde de Orihuela (del PP) y el señor Mazón lo mantiene como alcaldable. El día que yo presentaba a mi candidato en Calpe, un empresario de la sociedad civil, el señor Mazón en El Campello estaba presentando a un alcaldable al que la Fiscalía pide 13 años de inhabilitación. Eso es una burla. El señor Mazón está jugando con transfuguismo, eso es corrupción institucional. Aquel que aspira a ser presidente no respeta el pacto antitransfuguismo, se burla de él, incluso los pone a liderar las listas electorales... Para mí, pierde mucho en calidad democrática.

¿Plantearán alguna medida relativa a los tránsfugas en la próxima legislatura?

Lo primero que le pedí a Ximo Puig como portavoz parlamentaria fue renovar el pacto antitransfuguismo. Esto nos pone a todos en el mismo saco. Mientras no haya listas abiertas, en las que se elija a una persona, el acta debería ser del partido. ¿Quién conoce a quien iba de número 5, 6 u 8 del partido? La gente votó por las siglas. Mientras esto no se modifique, el acta debería ser del partido.

Otro de los puntos fue la reforma de la ley electoral. ¿Por qué no la aprobaron en su momento?

Porque fue muy complicado. Ahora, visto con perspectiva, a Toni Cantó no le interesaba, a los síndicos no les interesaba bajar la barrera del 3%, había propuestas muy interesantes como que hubiera un mailing único, con las que hubiéramos ahorrado mucho dinero a la ciudadanía. Podemos insistía mucho en que los dos primeros puestos fueran para mujeres y al final han presentado a un hombre... Había también reformas que podíamos hacer como bajar el número de diputados y hablar de la sobrerrepresentación. Un diputado por Alicante son 22.000 votos, por Castellón 11.000 y por Valencia casi 35.000, deberíamos aspirar al principio de una persona un voto.

Las encuestas plantean un escenario en el que es muy complicado que Ciudadanos llegue al 5% -el porcentaje de voto necesario para tener representación en las Corts Valencianes. ¿Se arrepienten de no haber apoyado esa reforma?

Yo me encuentro asumiendo el reto con una de las barreras electorales más altas de España; es lo que hay. La vamos a superar, no tengo dudas. Creo que esto es para reflexionar: muchos votos se pueden quedar fuera, más de 140.0000 ciudadanos que no van a tener representación en el parlamento por tener una barrera tan alta. Y sobre todo, a aquellos que no querían bajarla, por ejemplo el señor Mazón, le digo: el señor Juanma Moreno tenía una barrera del 3% y consiguió mayoría absoluta. ¿Qué miedo tienen? Ellos dicen en los mítines que no voten a Ciudadanos, que Ciudadanos no entre, ¿pero qué miedo tienen? ¿A que entre el sentido común, las políticas necesarias?, ¿a que digamos corruptos fuera?

¿Cree que hay una ofensiva del PP contra Ciudadanos?

Por supuesto. Nos tienen miedo.

Comentaba antes que Ciudadanos nació con vocación de ser un partido de centro, han usado la denominación partido bisagra... Pero la mayoría de pactos han sido con el PP. ¿Cómo encaja eso?

Bueno, discrepo. En Torrent, la población más grande de Valencia, tenemos un pacto con el PSOE. También en Castalla, en Xixona teníamos pacto con el PSOE, en Orihuela rompimos con el PP y el alcalde corrupto y tenemos pacto con el PSOE. Sí que es cierto que en los pactos se dio demasiado protagonismo al PP, por ejemplo en el Ayuntamiento de Alicante o en la Diputación y no tendríamos que habérselo dado.

¿En las próximas elecciones, aunque sea a nivel municipal, buscarán acuerdos con el PSOE o el bloque de izquierdas?

Creo que a partir del 28M no hay pactos de siglas o de derechas o izquierdas, va a haber propuestas, soluciones e ideas. No va a ser un pacto de me das un asiento como vicepresidente de la Diputación o la conselleria de tal, como se ha hecho hasta ahora. Recordemos que Ximo Puig hace 12 consellerias para contentar a sus socios. Ese problema ningún partido lo va a tener con nosotros; no vamos a hablar de sillones, vamos a hablar de propuestas. Sacaremos una serie de puntos que quien los apruebe, firmados ante notario y que nosotros marcaremos, tendrá nuestros votos.

Hablando de pactos, sí que votaron la reforma fiscal de Puig y la comisión de reconstrucción en las Corts, planteada por el Botánico.

Sí. Y en la comisión nos comprometimos a tener 2.000 plazas de residencias y cero se han construido, incluso están recortando. Ese pacto que fue por escrito, un compromiso del Botánico, ha sido un fiasco porque no se ha cumplido. Y era un pacto que beneficiaba a los ciudadanos. Hablamos de dependencia, que estamos tardando más de 300 días en esos expedientes...

Preguntaba por la reforma fiscal porque ustedes la votaron pero tienen otra bien distinta.

La propuesta de rebaja fiscal de Ximo Puig representa 111 euros a cada valenciano, pero ellos se subieron los sueldos 3.000 euros. Eso fue una vergüenza. Nuestra rebaja fiscal es cero euros de impuesto de transmisiones patrimoniales para la compra de vivienda, la bonificación al 99,9% del impuesto de sucesiones, pero sobre todo en el IRPF, estamos hablando del día a día. Con la inflación el Gobierno ha cobrado mucho más, eso se debe revertir en la ciudadanía. Cuando un ciudadano hace la declaración de la renta no se puede desgravar la hipoteca, tampoco las gafas o las lentillas o los gastos de dentista, la guardería, los gastos extraescolares... ¿Cuánto pagamos las familias? El IRPF se debe adecuar a la realidad.

¿Esa rebaja fiscal no supone una merma de ingresos?

No. Junto con las rebajas fiscales vamos a proponer una medida que es modificar el Estatut d'Autonomia para que volvamos al número original de diputados o menos; de 99 queremos bajarlo a 75. Muchas agencias, observatorios, se tienen que revisar y eliminar. Hay que limitar asesores y poner en valor a los funcionarios, que pueden estar en una conselleria o un grupo parlamentario. Hay que reducir los gastos de los grupos parlamentarios, que percibimos demasiados ingresos, nuestra propuesta es reducirlos un 30%.

Es una cuarta parte del parlamento.

Sí. Imagina todo lo que podemos ahorrar. Me contaba ayer Fermín Artagoitia, que se ha sumado al equipo, que cuando fueron decisivos en el CDS y en Unión Valenciana eran solo cinco diputados. Con cinco diputados fueron capaces de hacer muchas modificaciones; a veces no es tanto el número como la calidad. Yo propondría que a los políticos se nos controlara nuestro trabajo, que tuviéramos que rendir cuentas a la ciudadanía cada mes.

¿Unión Valenciana es el espejo en el que se mira Ciudadanos?

Ciudadanos intenta coger lo mejor de cada uno. Nuestro candidato por Alicante, José Miguel Saval, estuvo en la directiva de Adolfo Suárez. Cuando habla de él, imprime carácter. Si hoy tenemos derechos y libertades es gracias al consenso, la generosidad y el talante de aquella época política de la que hemos de aprender. Lo echo de menos en el Parlamento.

Ciudadanos ha planteado numerosas medidas en Sanidad y Educación, esta legislatura...

En Sanidad tenemos algo muy claro. Mi hija, que hace el MIR en Gandia, me pide que reivindiquemos la tarjeta sanitaria única, poder acceder al historial clínico de las personas que vienen de Madrid, por ejemplo. También hay que topar las listas de espera. Hemos generado el síndrome del quemado en médicos y profesores. Los profesores sienten que se les ha perdido el respeto, que les toca hacer de todo, a veces incluso repartir la medicación. El profesor está para enseñar, no está tampoco para atender los problemas psicológicos... ¿Cuántos chavales han intentado suicidarse? El profesor tiene que hacer muchísimas más cosas que enseñar, los estamos quemando.

Comentaba antes, a propósito de las conductas autolíticas en adolescentes, la idea de un cheque. ¿En qué consiste?

El psiquiatra y el psicólogo no son un lujo. Tenemos listas de espera donde los males pueden ser irremediables. Ir al psiquiatra o al psicólogo debe ser prioritario, uno debe poder ir a un profesional, aunque sea privado, y que lo pague la Administración. La colaboración público´privada es la única manera, hay que apartar medidas sectarias.

¿Qué modelo plantean para la radiotelevisión pública valenciana?

Lo primero es unificar los dos entes, es absurdo tener dos cabezas. Entiendo que la televisión pública se tiene que mantener. Tendrías que preguntar a otros, a los que están pidiendo la cabeza de À Punt por un titular populista. Eso me da miedo. ¿Poner en jaque a tantas familias es justo? Detrás de la tele hay familias, hay trabajadores, hay mérito y capacidad. A mí me gusta una televisión pública abierta, que recoja nuestras fiestas, cultura y patrimonio; que no caiga en sectarismos, claro, pero para eso ya están los organismos de control. Nosotros revalidamos al director porque entendimos que una campaña electoral no se podía iniciar sin revalidar la confianza, pero, aparte, no hay otro candidato mejor; no lo ha hecho mal.

¿Y sobre la financiación autonómica?

Hace falta que Ciudadanos gane en el Gobierno de España. Como el tren de la costa o el Corredor Mediterráneo, que son estructuras que el bipartidismo no se cree. Hemos tenido políticos que no son valientes.

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