No todas valen: cómo elegir una funda para proteger nuestro móvil

Desde hace ya unos cuantos años, los móviles nos acompañan a dónde vayamos. Y, durante todo este tiempo, es raro que alguno de nuestros terminales no haya acabado en el suelo y con algún desperfecto tras una caída, sobre todo en el trayecto hasta la oficina. Por eso, escoger una funda para proteger nuestro móvil que aúne diseño y seguridad es realmente importante.

Los smartphones son, por lo general, productos muy frágiles. Aunque cada vez más las marcas protegen sus dispositivos de arena, agua e incluso caída, existen algunos puntos débiles como pueden ser las pantallas o las esquinas del terminal.

Por eso, un accesorio habitual es la funda: una cubierta que no solo protege el móvil, sino que puede darle nuestro toque personal. Y aunque parezca una decisión que se puede tomar a la ligera, gastarse un gran dinero en un terminal para luego no tenerlo bien protegido puede ser un despropósito.

¿En qué fijarnos al comprar una funda?

Para muchos de nosotros, escoger una funda para el móvil es tan sencillo como buscar una barata. Pero puede que nos interese reflexionar más acerca de lo que queremos.

En primer lugar, tenemos que pensar si estamos buscando una funda que afecte lo menos posible al tamaño del móvil o, en cambio, nos da igual que aumente y, por tanto, cambie nuestra forma de cogerlo y utilizarlo. En segundo lugar, hay que tener en cuenta qué pretendemos que haga nuestra funda.

Puede que necesitemos una cubierta que, principalmente, proteja nuestro móvil de las caídas más llamativas porque somos torpes. O, simplemente, queremos una funda que le de algo de personalidad al móvil y, al mismo tiempo, lo proteja levemente. Por lo que hay que fijarse en:

Material.

Muchos relacionamos las fundas de móviles a la silicona, que las hace flexibles y resistentes al temporal, aunque no son las más seguras.

A pesar de ello, existen muchos materiales: madera -ecológicas y resistentes-, cuero, policarbonato -estéticas y muy protectoras- o aluminio -rígidas-. Cada uno de los materiales se ajusta a unas necesidades.

“Extras”.

Cada vez son más las fundas que incluyen accesorios que pueden resultar de utilidad para algunos usuarios. Estos extras suelen ser: un cordón para colgarnos el móvil del cuello, un anillo que facilita el agarre, espacios para guardar los cascos, soportes para sujetar el móvil, etc.

Tipos de fundas

Para escoger mejor, podemos repasar algunos tipos de fundas y un ejemplo de cada -utilizaremos fundas del Samsung Galaxy A51, el que fuera el móvil más vendido en España durante el 2020-:

1. De contorno/Bumpers

Las clásicas fundas plásticas (de silicona) que se ajustan al contorno de nuestro móvil. Principalmente, protegen las esquinas del teléfono de posibles golpes y la cámara trasera de desperfectos.

Modelo recomendado: Funda LYJERRY

Una funda sencilla que incluye un cordón para colgarse del cuello el móvil. Por 9,99 euros. Está disponible en cuatro colores que tapa toda la parte trasera del terminal y está fabricada en silicona. Se trata de una opción barata donde prima el diseño por sobre el resto de aspectos.

2. Fundas completas

Cubren tanto la parte de trasera como la pantalla, ya que incluyen una tapa. Suelen tener forma de libro -que se abren como si fueran uno- y protegen muy bien el terminal, aunque pueden ser incómodas.

Modelo recomendado: Holidi Funda

Por 15,99 euros, esta funda con tapa fabricada en piel sintética y carcasa de silicona protege nuestro móvil de la mayoría de caídas. Además, la tapa que cubre la pantalla cuenta con unos bolsillos para llevar tarjetas y billetes.

3. Híbridas

Las fundas más resistentes, ya que suelen combinar PVC con otros materiales para asegurar una mayor protección. También suelen contar con diseños más llamativos y son mucho más gruesas que la mayoría.

Modelo recomendado: BestST Funda

Por 8,99 euros, la funda de BestST es una de las híbridas más baratas. Se trata de una carcasa cuya principal función es proteger lo máximo posible el móvil. Incluye un cristal templado, un anillo en la zona de atrás para sujetar el móvil y una zona imantada para poder sujetarlo en ciertos aparatos.

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