Cómo preparar tomates rellenos de arroz, una receta muy sabrosa y fácil para días de verano
En verano, el apetito cambia. A causa del calor, el cuerpo nos pide comidas más frescas, sencillas y ligeras. Ahora es la época del gazpacho, las ensaladas y los platos que se pueden disfrutar al aire libre, con buen tiempo y sin prisas. En ese repertorio, hay una receta que nunca falla por su sabor y su sencillez, los tomates rellenos de arroz.
Ligera, colorida, saludable y absolutamente deliciosa: la receta de tomates rellenos de arroz es uno de esos platos veraniegos que lo tienen todo. Perfecto para servir frío o templado, y tan versátil que admite infinitas variantes. Te contamos paso a paso cómo prepararlo en casa.
Se trata de un plato de origen mediterráneo, muy popular en Italia como pomodori di riso, pero también frecuente en cocinas francesas y españolas. Tradicionalmente, se rellena el tomate con arroz cocido y se aromatiza con hierbas, ajo, cebolla o, incluso, con un toque de queso o atún. Esta receta es ideal para aprovechar tomates maduros y preparar una comida completa sin necesidad de encender demasiado tiempo los fogones.
Cómo prepararlos paso a paso
Con solo unos tomates maduros y un poco de arroz puedes llevar a la mesa un plato lleno de sabor, color y espíritu veraniego. Para la receta necesitarás:
- Ocho tomates grandes y maduros, de piel firme
- 150 gramos de arroz de grano redondo (tipo bomba o similar)
- Una cebolla pequeña
- Dos dientes de ajo
- Un puñado de hojas de albahaca fresca
- Perejil fresco al gusto
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta negra recién molida
- Queso rallado (opcional)
A continuación, te explicamos cómo hacerlo paso a paso:
- Comienza por lavar bien los tomates y cortarles la parte superior, como si fueran una tapa (resérvalas, ya que se usarán después para cubrirlos).
- Con la ayuda de una cucharita o un sacabolas, vacía con cuidado la pulpa interior, sin romper la piel del tomate. Es importante dejar una pared de al menos medio centímetro para que mantengan la forma durante la cocción.
- Coloca la pulpa extraída en un bol y tritúrala ligeramente con un tenedor. Reserva tanto los tomates vacíos como su contenido.
- Para preparar el sofrito, pica finamente la cebolla y los dientes de ajo. En una sartén amplia, añade un buen chorro de aceite de oliva virgen extra y sofríe la cebolla a fuego medio hasta que esté transparente. Añade el ajo y cocina un par de minutos más sin que se dore demasiado.
- Agrega la pulpa de tomate reservada y deja que se cocine durante unos diez minutos, removiendo de vez en cuando. La idea es que el líquido se reduzca ligeramente y la mezcla adquiera sabor.
- Incorpora el arroz crudo directamente a la sartén con el sofrito. Cocina unos dos o tres minutos para que se impregne bien de los sabores. Añade sal, pimienta y las hierbas frescas picadas.
- A diferencia de otras recetas, en esta no se cocerá el arroz completamente en agua, sino que se terminará de hacer en el horno, absorbiendo el jugo del tomate y del sofrito.
- A continuación, precalienta el horno a 180 °C. Mientras tanto, con una cuchara, rellena cada tomate con la mezcla de arroz hasta casi el borde. Ten en cuenta que el arroz se expandirá un poco durante la cocción. Si quieres, puedes añadir una cucharadita de queso mozzarella en el centro para un resultado más cremoso.
- Coloca las tapas de los tomates encima y colócalos en una fuente para horno ligeramente engrasada con un poco de aceite.
- Introduce la bandeja en el horno de 45 a 60 minutos, dependiendo del tamaño de los tomates. A mitad de cocción, puedes cubrirlos con papel de aluminio para que la piel no se haga demasiado.
- Si quieres, espolvorea más queso por encima en los últimos 10 minutos y gratina.
Variaciones y consejos
Los tomates rellenos de arroz pueden comerse calientes, templados o fríos, lo que los convierte en un plato comodín perfecto para dejar preparado con antelación. Incluso al día siguiente están más sabrosos, ya que los sabores se asientan.
Además, una de las mejores cosas de esta receta es lo fácil que resulta personalizarla. Aquí van algunas ideas:
- Con atún o pollo: añade un poco de atún en conserva o restos de pollo cocido desmenuzado al relleno para una versión con más proteína.
- Versión vegana enriquecida: incorpora garbanzos cocidos, lentejas o tofu desmenuzado para un aporte vegetal completo.
- Toque oriental: añade un poco de curry suave o cúrcuma al sofrito y sustituye el perejil por cilantro.
- Arroz integral o quinoa: puedes sustituir el arroz blanco por arroz integral o quinoa, aunque deberás ajustar el tiempo de cocción previo.
- Queso fundente: un corazón de mozzarella o feta en el centro del tomate hará que la combinación de sabores sea aún más explosiva. Además, el queso feta aportará algo más de proteína al plato.
- Hierbas aromáticas: además de albahaca y perejil, puedes experimentar con tomillo, orégano, romero o menta.
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