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La fiscalía retira la acusación contra un joven que defendió en la calle a un inmigrante senegalés
Asturias —
El Ministerio Fiscal de Asturias ha decidido no presentarse como acusación en la denuncia por “alteración del orden público”, interpuesta por dos agentes de la Policía Nacional contra el joven médico residente, Andrés Fernández Vilanova, por defender en plena calle de Oviedo a un inmigrante senegalés que estaba siendo supuestamente detenido de forma ilegal.
El fiscal tras escuchar el relato de los hechos consideró que “no hay caso”, aunque los dos policías mantienen la denuncia y la jueza tendrá que decidir sobre el caso del médico activista del colectivo ‘Ruta contra el Racismo y la Represión’. Los hechos sucedieron el pasado mes de febrero en las inmediaciones del Hotel Reconquista, donde se hospedan los premiados Príncipe de Asturias.
Los ánimos entre los colectivos antirracistas estaban encendidos, porque la Policía Nacional había realizado varias redadas contra gente africana, requiriendo la documentación a las puertas de asociaciones de asistencia a inmigrantes. Según cuenta Fernández Vilanova, vio a dos individuos blancos que se llevaban a un africano hacia la comisaria y se acercó a preguntar.
“Me dijeron que no era asunto mío y me enseñaron la placa. Entonces, empecé a informar en voz alta a la gente que pasaba por la calle de las eidentificaciones y detenciones ilegales y de las deportaciones. Los policías me dijeron que estaba poniendo a la gente en su contra, me pidieron que me identificase, y aquí estoy”, ha declarado ante la jueza.
Ahora su caso sigue su curso. Andrés Fernández Vilanova dice que “actué como tenía que actuar y lo volvería hacer”. En apoyó al médico intervino un ciudadano, que reconoció al inmigrante africano y aseguró a los agentes que tenía papeles. “Eso me tranquilizó, porque sé que no lo van a deportar”, añade.
Para los colectivos antirracistas, el problema de fondo son las redadas indiscriminadas que hace la Policía, que “en cuanto ven que son de otro color van a por ellos”, dice. En un comunicado, recuerdan que este tipo de identificaciones es ilegal, tal como ha denuncia públicamente el Sindicato Unificado de Policía (SUP) y la circular de la Policía Nacional, el 21 de mayo de 2012, que prohíbe las redadas para deportar inmigrantes.
Lo que está pasando en Oviedo no son casos aislados y aseguran que el Ministerio de Interior, a través de la Comisaría Central de Extranjería y Fronteras, “negocia vuelos semanales con sus países de origen, de los cuales compañías áreas como Air Europa son beneficiarias privilegiadas”.
El colectivo ‘Ruta contra el Racismo y la Represión’, tiene fechas concretas con aviones destino a Dakar: “El 26 de septiembre de 2013 salió uno, el 19 de noviembre, otro y el 13 de febrero, otro”. La Policía Nacional reconoce que cada dos meses sale un avión de Barajas para repatriar inmigrantes de Senegal.
Pero los jueces asturianos tampoco quieren entrar en el fondo de la cuestión y en la mayoría de los casos optan por dejar a los inmigrantes en libertad sin cargos. “Este tipo de actuaciones son contrarias a los derechos humanos e incluso al deficiente código legal actual por suponer una clara discriminación racial”, señalan en el comunicado.
