Jordi Savall: “'La Creación' de Haydn es una obra excepcional, fascinante”

Barcelona, 29 abr (EFE).- El músico Jordi Savall acometerá por primera vez en su larga carrera la dirección de “La Creación”, de Joseph Haydn, una obra que este jueves ha calificado de “excepcional y fascinante”, en un concierto doble que tendrá lugar el día 4 de mayo en el Palau de la Música, con la mitad de su aforo.

Frente a sus grupos Le Concert des Nations y La Capella Reial de Catalunya, Savall contará con la soprano Yaree Suh, en los roles de Gabriel y Eva; con el tenor Tilman Lichdi como Uriel, y con el barítono Matthias Winckhler, como Rafael y Adán, para dar forma a “una de las grandes obras de todos los tiempos”.

Feliz de regresar al modernista edificio barcelonés en un receso de los ensayos del “Orfeo” de Monteverdi que lleva a cabo en París, el maestro catalán ha dicho sentirse “fascinado” desde siempre por esta pieza de Haydn, que se estrenó de forma semiprivada en 1798 y que narra la creación del mundo después del caos.

En rueda de prensa telemática desde su casa de Bellaterra, ha considerado que el compositor austríaco refleja en sus obras sus vivencias más íntimas y, a la vez, “es capaz de exprimir todo el dramatismo, aunque siempre conserva la esperanza, la joya, el amor, yendo muy al fondo, con una gran capacidad creativa”.

El director igualadino, que ha aseverado que París parece en estos tiempos “una ciudad en guerra, con todo cerrado”, ha desvelado que, justamente como en Francia le han anulado varios proyectos, cuando termine el concierto de Barcelona se desplazará con sus músicos hasta Cardona para grabar “La Creación” en el castillo de esta localidad.

Contagiado por el coronavirus el pasado día 12 de octubre, hoy ha bromeado con que desde entonces tiene más ganas de dormir (“alguna cosa me ha quedado de cuando tuve el virus, en unos días en los que dormí mucho”) y ha explicado que este año de pandemia le ha permitido “hacer una vida regalada, sin tomar aviones, paseando con mis perros, con mi mujer, nadando, o sentándome en una mesa para tomar un café”.

A su juicio, “uno se acostumbra a una vida tan diferente a la anterior, de maletas y aviones, y, por suerte, he descubierto lo que es la vida en la que puedes vivir teniendo tiempo para pasear y leer un libro durante dos horas”.

Aunque también ha dedicado tiempo a preparar futuros proyectos, ha explicado que gracias a estos meses ha podido “entender el placer que sienten Adán y Eva por el bosque, por el canto de los pájaros, algo fantástico”, en referencia a lo que ocurre en “La Creación”.

De todas maneras, si la situación sanitaria va mejorando, Jordi Savall, que en verano cumplirá 80 años, ha avanzado que su actividad continuará siendo “intensa” en 2022 y que en 2023 intentará bajar un poco el ritmo, aunque en su agenda ya queden pocos huecos, igual que en 2024.

Para este mes de octubre, tiene previsto reemprender en el Gran Teatro del Liceu las dos últimas sinfonías de Beethoven, la Octava y la Novena, que cerrarán el 250 aniversario del nacimiento del compositor de Bonn, una ciudad a la que Savall también viajará en los próximos meses, igual que a Hamburgo y a Lisboa, entre otras. EFE

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