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Las 600 personas rescatadas en el Aquarius tendrán estatus de refugiadas

La vicepresidenta Mónica Oltra preside la reunión  de la comisión mixta de atención y acogida a personas desplazadas y refugiadas con las entidades y personas implicadas en el rescate del Aquarius

Laura Martínez

Valencia —

Las más de 600 personas que viajan a bordo del Aquarius serán atendidas como personas refugiadas en España. El subdelegado de Gobierno, José Vicente Herrera, ha informado en la comisión mixta para la atención y la acogida en Valencia de que se atendera a estas personas con un estatus especial por la situación de “emergencia y excepcionalidad”. La vicepresidenta del Gobierno valenciano, Monica Oltra, ha trasladado las palabras del responsable segundo de la delegación del Gobierno en Valencia en una rueda de prensa convocada al acabar la reunión.

Las personas serán atendidas por un efectivo de unos 200 profesionales durante sus primeras horas en la Marina de Valencia. La antigua sede del Alinghi, con 1.600 metros cuadrados que ya han sido acondicionados, será la base de operaciones para el primer dispositivo de atención a las personas que desembarquen en los próximos días en Valencia.

 La también consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas ha presidido este martes la comisión mixta con entidades sociales para hacer un mapa de los recursos con los que cuenta la Comunitat Valenciana para la atención y acogida de las personas a bordo de la embarcación Aquarius. En esta reunión se ha decidido que las primeras atenciones, que prestará Cruz Roja, se harán en las inmediaciones del puerto de Valencia.

La organización lleva trabajando desde el lunes para obtener mantas y acondicionar espacios para que puedan ser usados como centro de distribución, donde dormir y recomponerse. Prevé que haya 70 personas en estas funciones de atención primaria. Delegación de Gobierno también actuará nada más desembarcar y procederá a las identificaciones  y comenzar a solicitar protección internacional para quien lo requiera. La mayor parte de los rescatados son de procedencia subsahariana. Si el Gobierno decide tratarlos como refugiados, tendrán derecho al alojamiento sin supervisión policial y a una pequeña asignación económica. Dada la excepcionalidad y las condiciones del Aquarius, Oltra considera que se aplicará este criterio.

El Ejecutivo autonómico ha preparado un dispositivo con atención sanitaria urgente, que prevé el traslado de las mujeres embarazadas al hospital y de las personas que sufren quemaduras a consecuencia de la larga exposición solar. Facilitará en las siguientes horas intérpretes para ayudar con los trámites administrativos. Habrá ademas, según Oltra, personal de la red Mujer 24 horas para atender a posibles víctimas de abusos sexuales. Los menores no acompañados serán atendidos directamente por la dirección general de infancia y la Generalitat facilitará atención psicológica tras el desembarco. Por otro lado, para agilizar los trámites, se duplicará el personal judicial. Los dirigentes destacan la respuesta “masiva e inmediata” de decenas de municipios que ofrecen lugares de alojamiento para las personas recién desembarcadas.

La previsión es que la nave llegue al puerto de Valencia entre el viernes y el sábado. Cuatrocientos rescatados han pasado a las fragatas italianas, país que rechazó su acogida, para acompañarlos hasta las costas españolas. El personal de emergencias italiano ha trasladado desde lanchas al barco cajas con fruta fresca y productos empaquetados, junto a medicamentos que han sido entregados a primera hora de la mañana. Las ONG que tripulan el barco insisten en que la mejor opción era ir al puerto más cercano, pero dado el rechazo de Italia, se acepta la oferta española.

Durante los próximos días se seguirán convocando reuniones para detallar al milímetro las actuaciones a seguir. El miércoles habrá una en el centro de emergencias. Se trabaja también con la delegación del Gobierno para los posibles traslados, que irán en función del caso particular de cada persona.

El Gobierno de España inició el lunes la vía diplomática para efectuar el rescate lo antes posible, garantizando la seguridad de las personas que están a bordo. La vicepresidenta, Carmen Calvo, se desplazará esta semana a Valencia para coordinar los movimientos desde el “puerto seguro”. Calvo ejercerá de mediadora entre el gobierno autonómico y el central para atender la crisis humanitaria y prevé una reunión con Ximo Puig, jefe del Ejecutivo valenciano, entre el miércoles y el jueves. Hay seis ministerios implicados en la gestión desde que el ministro italiano rechazara a los migrantes.

La oferta del Gobierno central del puerto de Valencia como espacio seguro ha desencadenado una ola de solidaridad en otras comunidades autónomas, que han ofrecido decenas de municipios para acoger a las personas que lo necesiten. La idea del Ejecutivo es que, una vez en suelo español y con la atención sanitaria necesaria, el Ministerio de Interior analice caso por caso la situación de las más de 600 personas que viajan a bordo antes de proceder a la acogida a la que se han ofrecido varias comunidades y ayuntamientos. Respecto a esta acogida, la vicepresidenta valenciana ha indicado que no se está en esa fase, sino en la primera acogida, en las primeras atenciones. En el caso de los menores que se encuentran solos, fuentes del Gobierno aseguran que se quedarán en Valencia, previsiblemente bajo tutela de la Generalitat. Son más de un centenar.

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