El Gobierno abre la puerta a un modelo de déficit a la carta para las comunidades autónomas

Las comunidades autónomas podrían tener una senda fiscal personalizada, de acuerdo con su deuda acumulada, su facilidad para acceder a los mercados o sus esfuerzos pasados en disciplina presupuestaria. Este es uno de los principales acuerdos al que llegaron el miércoles por la noche los consejeros de Hacienda de las comunidades autónomas españolas y el ministro del ramo, Cristóbal Montoro, en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF).

Para trazar unos criterios uniformes para decidir cuál debe ser el objetivo de déficit de cada autonomía, los responsables de las finanzas estatales han organizado un grupo de trabajo que definirá los parámetros a seguir. La flexibilización ha sido una de las demandas más recurrentes de las comunidades autónomas. Las más aplicadas en cumplir el objetivo de déficit quieren ver recompensados sus esfuerzos con un traje a medida en forma de estrategia fiscal personalizada.

Durante la reunión, Montoro trasladó a los consejeros su intención de aligerar el objetivo de déficit para las comunidades, que este año es de un 0,7%, en el momento en el que Bruselas ratifique que le da más tiempo a España, en su conjunto, para reducir el tamaño de su agujero financiero en este ejercicio. La meta inicial para 2013 era del 4,5% pero todo parece apuntar que Bruselas relajará de nuevo esta cifra. España le ha comunicado a Bruselas que en 2012 su déficit se redujo hasta el 6,7%, sin contar con las ayudas a la banca.

En este sentido, Montoro reconoció ante los medios en la rueda de prensa posterior que la teoría dominante en Bruselas en este momento es la de no forzar la máquina de los ajustes. Según el ministro de Hacienda, que hizo gala de un estupendo humor muy diferente al que ha exhibido en sus últimas intervenciones públicas, Bruselas ha puesto el “límite” a los ajustes en aquellos que puedan dañar la economía o ahondar la recesión.

Además, el colegio de consejeros de Hacienda decidió también organizar otros dos grupos de trabajo, uno para estudiar el posible cambio del modelo de financiación autonómico y otro para reducir las trabas y las duplicidades entre autonomías. Montoro recordó que cambiar el modelo de financiación no es sencillo porque algunas comunidades quieren y otras no.

Además, en el CPFF se discutió la posibilidad de seguir suministrando liquidez a las comunidades autónomas, aunque el ministro, que aseguró estar muy “comprometido” con esta cuestión no detalló si se hará mediante nuevos fondos para planes de proveedores.

Algunos consejeros contaron a la salida de la reunión que Montoro no había felicitado ni criticado a las comunidades por la aplicación en los objetivos de déficit de 2012. Esto es, que no se hizo distinción entre las que cumplieron el déficit y las que no, algo que a las más aplicadas puede no haber sentado bien. Además, fuentes presentes en el consejo aseguraron que todos los consejeros, incluidos los de comunidades que no están gobernadas por el PSOE como Andalucía y Catalunya, felicitaron al ministro por la espectacular reducción del déficit en 2012.