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Una subcontrata lleva casi tres meses sin pagar a las limpiadoras de la Biblioteca Nacional: “Estamos desesperadas”

Protesta del personal de limpieza de la Biblioteca Nacional, a las que la subcontrata DLR debe ya dos meses de salario.

Laura Olías

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Dos meses sin cobrar y a unos días de que se cumpla un tercero. Es lo que acumulan, en una situación “desesperada”, las trabajadoras de la limpieza de la Biblioteca Nacional, dependientes de la empresa subcontrata DLR Facility Services. La compañía fue fundada en 2012 por el empresario Ángel de la Rúa, que creó recientemente un grupo mediático ultraconservador y de la órbita de Vox, Decisión Media, con figuras como Alfredo Urdaci y Albert Castillón, entre otros. “Hay gente que va a perder su casa porque no puede pagar el alquiler. Estamos desesperadas, es una situación extrema para muchos compañeros y compañeras”, denuncia Raquel Martínez, limpiadora en el organismo público y delegada de UGT.

Las limpiadoras han protagonizado este mes paros de una hora en días alternos, que este miércoles se visibilizarán con una concentración frente a la sede en Madrid del organismo público, a las 9 horas. Aunque la empresa no les paga, la plantilla ha de acudir a sus puestos. “Es muy duro venir cada día a trabajar sin cobrar porque, si no, te pueden echar”, advierte Martínez, que recuerda que en la plantilla hay personal con “más de 20 años” en sus puestos.

Fuentes de la empresa DLR responden que esperan “poder pagar a finales de esta semana todo lo adeudado”. En la plantilla les gustaría creer sus palabras, aseguran: “Ojalá, pero ya hemos oído esto antes y no ha ocurrido”. A escasos días de que termine noviembre, las trabajadoras ya se plantean dar un paso más. “Ir a una huelga indefinida el próximo mes” si no reciben el siguiente pago, afirma la representante de los trabajadores.

Retrasos “desde el principio”

“Desde el inicio de la adjudicación, en octubre de 2021, DLR no ha pagado puntual. Tenían que ingresarnos las nóminas el 30 de cada mes y esa ha sido la excepción. Siempre había algún problema, alguna excusa y nos pagaban con retraso: que si el 7, el 15, ... Hasta que nos han dejado de pagar y ya van casi tres meses”, explica Raquel Martínez. Casos similares se han registrado también en el Ayuntamiento de Madrid, donde la empresa tiene adjudicada la limpieza en el área de Gobierno de Familias, Igualdad y Bienestar Social, como denunció CCOO hace unos meses, y en el Ayuntamiento de Torrelodones, entre otros.

La delegada de UGT lamenta que DLR recibiera la adjudicación del servicio público, “una empresa en pérdidas” (casi -45.000 euros en 2021, aunque más de 300.000 euros de beneficio en 2020). “Los retrasos y estas prácticas con sus trabajadores se conocían, solo hay que mirar en internet y hay casos anteriores”, lamenta la trabajadora. Sin embargo, el pasado año la compañías de De la Rúa sumó numerosas adjudicaciones de servicios públicos, como se puede ver en la Plataforma de Contratación del Estado.

En Biblioteca Nacional explican que “lamentan profundamente” la situación de impagos de DLR, con la que ya han iniciado los trámites para rescindir el contrato. El servicio fue adjudicado “en proceso abierto, con las máximas garantías de claridad y gestión”, indican.

Fuentes de la compañía afirman que DLR atraviesa una “situación compleja” por “deudas y retrasos de terceros”, entre los que la empresa destaca “la Administración Pública” y en concreto a Biblioteca Nacional. Desde el organismo público dependiente del Ministerio de Cultura lo niegan con rotundidad. “La Biblioteca Nacional ha pagado en tiempo y forma cada una de las facturas del servicio de limpieza y ha mostrado desde el primer momento su preocupación ante el impago de las nóminas a las y los trabajadores de la contrata”, indican a elDiario.es.

La representante de la plantilla comparte la versión de la Biblioteca Nacional, que cree que está tratando de remediar la situación. “Biblioteca está pagando, pero ese dinero público no está yendo a pagarnos, no sabemos a dónde, pero a nuestras nóminas no”, critica.

Temor a una desbandada sin pagar al personal

En medio de esta tormenta laboral, Ángel De la Rúa, que se considera a sí mismo “muy valiente” como empresario, “que no inconsciente”, dejó el puesto de administrador único de su propia compañía en verano. El empresario dice estar centrado en su nuevo proyecto, el grupo mediático ultraconservador Decisión Media, que difunde lemas como “la casa de los valores” y que ataca con dureza al Gobierno de coalición (“social comunista”) mientras destaca la acción de Vox, en cuestiones como su 'no' a la Ley del solo sí es sí.

En la plantilla de la limpieza de Biblioteca Nacional hay temor de que la compañía esté en sus últimos momentos y que esté “aguantando” los meses que pueda para cobrar la adjudicación del servicio sin que eso llegue finalmente a los trabajadores.

“Lo que pedimos a DLR es que si no puede pagar, que se vaya. Que se marche voluntariamente para que entre otra empresa que sí nos pueda pagar las nóminas. Porque nos está llevando a una situación en la que estamos atados de pies y manos. Hay compañeros que van a perder la casa, que en su hogar dependen de esa única nómina, que no tienen para conseguir comida o pagar el metro. Esta es la situación”, apunta Raquel Martínez.

En DLR reconocen a este medio que alrededor “del 67%” de sus algo más de 250 trabajadores están afectados en estos momentos por problemas con los cobros de sus nóminas. “Es una situación muy compleja”, dicen fuentes de la compañía, que insisten en que están tratando de remontar la situación y “pagar todo el dinero” al personal. Sobre la rescisión del contrato para que las limpiadoras puedan cobrar, en DLR responden que están “valorando esa posibilidad”, pero “habría que ver los términos”, añaden.

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