Las previsiones de la organización agraria COAG indican que la campaña de la fruta extremeña alcanzará este año un 10 % menos de producción respecto a la del 2015. Las causas son la ausencia de frío durante varias etapas del pasado invierno, y la escasez de precipitaciones en el periodo de floración.
El presidente de COAG Extremadura, Juan Moreno, ha señalado que esta campaña, donde se esperan recoger unas 240.000 toneladas, será más larga de lo habitual, ya que empezó en mayo y finalizará en septiembre.
Moreno ha declarado que la campaña ha sido “complicada” y “desigual” mientras que la producción de cereza ha sido menor de lo habitual, otras frutas de hueso “se han comportado de mejor manera”.
Señala que actualmente el principal se encuentra en la ciruela, ha precisado, su campaña se retrasó debido a las lluvias primaverales y ahora se ve obligada a competir con otras zonas productoras.
Situación de los mercados
Moreno ha manifestado que todo esto provoca que los mercados puedan “saturarse”, razón por la que el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) ha tenido que ampliar en 500 toneladas el cupo para retiradas de ciruelas en el contexto de las políticas excepcionales tomadas por el veto ruso.
El presidente cree que el mantenimiento del veto ruso Extremadura hace que la región se vea obligada de nuevo a “renunciar a un mercado importante para la fruta”, además ver como el resto de países compradores “se saturan”.
Alternativas al veto ruso
Moreno considera que, aunque es difícil, se debe llegar a países con vendedores “consolidados”. En este sentido, el sector en la comunidad extremeña ha dado sus primeros pasos en China, país al que han salido recientemente los primeros contenedores.
El máximo responsable de COAG ha manifestado que “El sector confía en los buenos resultados en China durante estas primeras etapas, para lograr así un nicho de mercado más de cara a próximas campañas”.