El secretario general de UPA, el extremeño Lorenzo Ramos, ha advertido que la sequía prolongada está afectando a la rentabilidad de la ganadería y que la subida de los costes de producción asfixia a las explotaciones, “que están al borde de la ruina”.
Además la falta de gobierno en la Administración central está “lastrando a las producciones españolas”, y el país “no puede permitirse quedarse fuera” en las negociaciones que marcarán el futuro del sector agrícola y ganadero a partir de 2020.
Lorenzo Ramos ha criticado las declaraciones de la ministra de Agricultura en funciones, Isabel García Tejerina, durante la inauguración de la feria de Zafra.
Es cierto que las exportaciones han crecido en los últimos años, “pero este incremento no puede hacerse a costa de la ruina de los agricultores y ganaderos”.
Ha lamentado que la renta agraria haya descendido en España un 16 por ciento desde 2003, incrementándose los costes de producción una media del 46 por ciento.
Todo sube
También ha recordado que inversiones imprescindibles para la producción como los piensos han subido sus precios un 60 por ciento, los fertilizantes más de un 62 por ciento y la energía más de un 69 por ciento, mientras los agricultores “siguen perdiendo dinero cada año”.
El secretario general de UPA se ha referido asimismo a la reforma de la PAC, que, en su opinión, “no está funcionando para los agricultores y ganaderos profesionales” y ha añadido que el Gobierno en funciones “no funciona”, mientras que “los problemas del campo no están en funciones y necesitamos respuestas”.
Ramos apunta que la paralización del Gobierno en España puede perjudicar a los agricultores y ganaderos, porque en Bruselas ya se está negociando la PAC a partir de 2020 y mientras, en España, no se tiene ninguna posición oficial ni ninguna propuesta.
“Se están organizando reuniones informales a las que la ministra de Agricultura ni siquiera ha asistido”.
Para UPA es importante que España no vaya a remolque, porque “nos jugamos demasiado” y es necesario que el país apueste para que la nueva PAC resuelva las graves crisis que sufre el sector agroalimentario.