El presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, ha defendido que se están acordando todas las decisiones respecto al problema de la tuberculosis bovina en las explotaciones y pedido que tengan claro todos los ganaderos “que lo último que yo quiero es hacerles daño”.
“Lo último que querría sería hacer nada que les pueda perjudicar”, ha respondido al ser cuestionado en Navalmoral de la Mata por la concentración que han protagonizado hoy en Mérida varios centenares de ganaderos para denunciar este problema y pedir que se cambien los protocolos de actuación.
A comienzos de la legislatura se constituyó la Mesa de la Tuberculosis y se han tenido que tomar decisiones “difíciles ante una situación bastante complicada”.
Crecimiento espectacular
Según Vara, cuando llegaron al gobierno “el problema de fondo estaba ahí” ya que en los últimos años ha crecido “espectacularmente” el número de reses con positivo en tuberculosis“, por lo que se van ”pactando las decisiones, en el marco del ordenamiento y normas comunitarias internacionales“.
Se ha comprometido a ir mejorando las actuaciones pero sobre la base de que se trata de un problema que “hay que erradicar”.
Reconoce que en algunos casos vacas que habían dado positivo luego cuando se hacen los análisis de muestra no se confirma, por lo que se analizará, desde el punto de vista científico, cómo se puede ir mejorando, al tiempo que subraya la necesidad de concertar la política en esta materia.
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