CSI-F pide a Vara que cumpla la promesa de las 35 horas para los funcionarios
El presidente regional de CSI-F, Benito Román, ha instado al jefe del Ejecutivo extremeño, Guillermo Fernández Vara, a cumplir su compromiso de retornar a la jornada laboral de 35 horas para los empleados públicos.
“Las promesas están para cumplirlas”, ha aseverado Román, quien en una entrevista concedida a Efe ha recordado que Fernández Vara abogó por la recuperación de la jornada laboral de 35 horas antes y durante la campaña electoral de los últimos comicios autonómicos.
Román considera que a este compromiso “incumplido” se añaden otros, como el incremento salarial del 1% para los funcionarios, el calendario de oposiciones para “todos los sectores” de la función pública y dotar a las estructuras educativas y sanitarias extremeñas de los suficientes recursos, con un incremento de plantillas.
“Le pedimos a Fernández Vara que convoque cuanto antes a las organizaciones sindicales, entre las que está CSI-F, para volver a las 35 horas” semanales, ha reclamado Román, que ha pedido al presidente extremeño que dé voz y tenga en cuenta a su sindicato.
En este sentido, ha lamentado que “algunos” se escuden en la Ley Orgánica 11/1985, de Libertad Sindical, para excluir a CSI-F de las negociaciones por no ser, “a juicio de ellos”, una organización sindical considerada como “más representativa”.
“Queremos el espacio que nos corresponde, y nos avala” el artículo 7.2, en el que se señala que aquellas organizaciones sindicales que hayan obtenido, en un ámbito territorial y funcional específico, el 10 por 100 o más de delegados de personal y miembros de comité de empresa y de los correspondientes órganos de las Administraciones Públicas, estarán legitimadas.
Para remarcar esta posición, Román ha afirmado que CSI-F cuenta con un respaldo sindical en Extremadura del 14,37%, un porcentaje que se eleva al 35,5% en el ámbito de los funcionarios públicos de la Junta de Extremadura.
“Otra cosa es que haya alguien que se lo esté impidiendo”, ha apuntado Román, quien ha expuesto que su sindicato está para “luchar por mejorar las condiciones laborales de los funcionarios, no para tumbar gobiernos”.
A juicio de Román, la Junta debe establecer una oferta de empleo público “acorde a las necesidades reales y a la mejora de la calidad”. Eso conlleva, según ha añadido, publicar los calendarios de oposiciones, “pero todos, no sólo el de Educación”.
Recuperar poder de compra
Restituir los derechos “arrebatados” a los funcionarios en los últimos años y poner fin a la perdida del poder adquisitivo a la que han sido sometidos los trabajadores públicos son otros de los objetivos del sindicato.
Esta última exigencia pasa, en primer lugar, por la plasmación real y efectiva del compromiso del incremento salarial del 1%. “Se nos ha dicho que sí, pero según pasa el tiempo se pierde dinero”, ha manifestado el líder regional de CSI-F.
Considera Román que las víctimas de los fracasos políticos “vuelven a ser los empleados públicos” y la excusa de que “aún no hay presupuestos regionales” no sirve.
Según este sindicato, faltan unas 1.300 plazas en Educación y cerca de 600 en Sanidad. “Es primordial reforzar la educación, que ofrezca coberturas de refuerzo y atienda a las zonas rurales, y también la red pública sanitaria, donde hay falta de contratación y cobertura de interinidades”, ha agregado.
En su opinión, y en un prisma general, “los empleados públicos están teniendo más altura de miras que los políticos”.
Román ha sido “muy crítico” con el hecho de que un total de 3.656 empleados públicos de la Junta de Extremadura tenían concedida, a fecha de 31 de diciembre de 2015, una comisión de servicio por la que ocupan un puesto de trabajo en un destino diferente al que tienen asignado en origen.
“Lo venimos denunciando desde hace tiempo. Curiosamente, muchas de estas comisiones están en sitios muy estratégicos, como Cáceres, Badajoz y Mérida, donde es difícil acceder a una plaza definitiva”, ha expuesto el líder de CSI-F Extremadura.
