La otra cara de las elecciones, los emigrantes extremeños sin derecho a participar por el voto rogado

“Lamentablemente le informamos de que la solicitud de la documentación electoral es un trámite presencial, por lo que debería venir a Bucarest si desea ejercer su derecho a sufragio desde el extranjero”.

Esta es la respuesta que le dieron a Jara, una joven de Mérida de 23 años residente en Moldavia. La carta de la Embajada de España en Bucarest le indicaba que habían recibido su solicitud de inscripción como no residente y le habían dado de alta en el Registro de Matrícula Consular.

Pero para votar por correo le obligaban a recorrer 435 kilómetros, la distancia que le separa desde su ciudad --Chisináu-- de la capital rumana. El correo electrónico fue remitido desde la embajada con fecha del viernes 20 de noviembre, y le daban de plazo hasta el sábado 21 de noviembre para ir a Bucarest y hacer el trámite.

Ni Jara ni otros 20 españoles residentes en la capital de Moldavia pueden votar este domingo. Junto a ella, Ángela, Naiara, y Carmen, todas amigas, verán el resultado de los comicios en casa con mucha indignación. “Siento que a mí y al resto nos han robado nuestro derecho”. No encuentran un argumento razonable que explique por qué se les deniega algo tan fundamental como su derecho al voto.

No obstante les dieron un ‘plan b’ para no recorrerse 435 kilómetros en 24 horas. La sección consular de la embajada le proponía que si querían votar que se vinieran a España a pasar el fin de semana, o bien que vinieran a hacer la solicitud de voto por correo desde una oficina de Correos, en territorio nacional, claro.

Solo votará un procentaje mínimo

Del censo electoral extremeño un total de 884.528 personas residen en España, mientras que 25.732 lo hacen en el extranjero. Miles de extremeños migrantes se quedarán sin votar este domingo. De hecho Marea Granate denuncia que solo un 7,6 % de los españoles que residen en el extranjero han podido ejercer su derecho.

Las trabas han sido diferentes. Si en el caso de las jóvenes de Moldavia se las instaba a recorrer cientos de kilómetros, en otros casos no han llegado las papeletas del voto por correo. Incluso se ha reclamado al solicitante un tiempo mínimo inscrito en la embajada como residentes.

Este es el caso de Ellerina, una joven de Mérida de 28 años que lleva dos años trabajando como recepcionista en Londres, aunque fue a inscribirse como residente en Reino Unido hace un mes y medio, aproximadamente. A ella le indicaron que necesitaba llevar inscrita en la embajada como residente en Reino Unido al menos seis meses antes de solicitar el voto por correo.

Siguió insistiendo, y la respuesta telefónica de la señora de la embajada con la que habló la última vez fue que se cogiera un par de días libres y que se viniera a votar a Mérida. Así tal cual. También que no se preocupara, que para las siguientes elecciones ya podría ejercer su derecho al voto desde la capital británica.

Le han cedido el voto

Ellerina sí participará en las elecciones de este domingo, y no precisamente por las facilidades que la Ley Electoral o la embajada le han dado. Votará porque un abstencionista le ha cedido su voto. Irá al colegio electoral a votar por ella.

Se apuntó a la plataforma ‘Rescata mi voto’, que promueve el movimiento de la Marea Granate. Un sistema que pone en contacto a una persona que pensaba abstenerse con una persona de su comunidad emigrada. El objetivo es que aquellos a quienes se les ha negado votar desde el extranjero, puedan hacerlo de esa manera indirecta.

Más de 3.000 emigrantes españoles podrán votar este domingo gracias al sistema de ‘Rescata mi voto’, de los que 85 serán extremeños. Uno de los abstencionistas que ha cedido su voto en Extremadura es José, de 30 años, que comenta que ha optado por ceder su derecho a una migrante en Reino Unido—y así acudir finalmente a votar—por justicia.

“Por poner rostro a las vergüenzas de un sistema electoral, que no solo manda al exilio laboral a miles de jóvenes, sino que les pone trabas para que voten”.

3.000 abstencionistas se pronunciarán a través del sistema de 'Rescata mi voto', aunque otras 9.000 personas emigradas no han obtenido un tándem que vote por ellos. En Extremadura, se contabilizan 227 migrantes huérfanos que finalmente no han logrado hacer pareja a través de la plataforma de ‘Rescata mi voto’.