Cuatro ciudades extremeñas, pendientes de la decisión de selecciones nacionales para ser subsedes del Mundial
El director general de Jóvenes y Deportes de la Junta, Santiago Amaro, ha destacado los avales que ofrecen tanto Extremadura como sus ciudades que optan a ser subsedes del Mundial de Fútbol 2030 (Badajoz, Cáceres, Mérida y Almendralejo) en aras a lograr este objetivo.
Se ha expresado así con motivo de la visita de los técnicos de la Real Federación Española de Fútbol al estadio Nuevo Vivero de Badajoz para conocer las características de estas instalaciones y que luego han realizado al resto de localidades extremeñas.
Santiago Amaro ha indicado que uno de los aspectos que juega a favor de Extremadura es que “es paso obligado” para todos aquellos ciudadanos que quieran trasladarse al país vecino para ver un determinado partido.
En este sentido, ha mencionado el hecho de contar con el aeropuerto de Badajoz, lo cual no considera que reste opciones al resto de ciudades extremeñas pues “las distancias son cercanas”.
Amaro también ha destacado el trabajo que realiza la Junta de Extremadura, y en el caso de Badajoz su ayuntamiento, para lograr este objetivo.
Además, las selecciones “huyen en ocasiones de las grandes ciudades” en la búsqueda de su base de operaciones, al preferir “un espacio tranquilo sin una gran acumulación de personas”, aspecto en el que Extremadura se posiciona como una opción clara.
La gastronomía extremeña, las plazas hoteleras existentes en las distintas ciudades y la afición por el fútbol en la comunidad autónoma son también otras bazas, ha añadido.
Los técnicos trasladarán ahora las mejoras a realizar en cada ciudad, así como un plazo para efectuarlas, y posteriormente se hará una nueva visita para dar el visto bueno a la posibilidad de que puedan ser subsedes, trabajo final que será remitido a la FIFA.
Esta federación trasladará esta información a las selecciones clasificadas, que son realmente quienes deciden donde ubicar su lugar de residencia y entrenamientos.
El alcalde de Badajoz, Ignacio Gragera, afirma que la ciudad actuará “de manera rápida y eficaz” ante cualquier requerimiento de mejora que expresen los técnicos, como por ejemplo la necesidad de contar con más campos de entrenamientos.
En el caso de que así se produzca, Badajoz afrontaría la inversión necesaria para realizar el nuevo proyecto y la ampliación de un campo ya existente que sean precisos pues “tiene partidas para ello”.
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