Una experiencia piloto en la Comunidad para empoderar y dar empleabilidad a mujeres con discapacidad

En Extremadura residen 106.000 personas que presentan algún tipo de diversidad funcional, de las cuales la mitad son mujeres, que paceden “doble discriminación” en la sociedad y en el mercado laboral.

Así lo manifiesta la Fundación CERMI que desarrollará un proyecto piloto en la región, para tratar de empoderar y aportar herramientas de empleabilidad a mujeres con discapacidad para su mejor acceso a puestos de trabajo.

A través del programa denominado Activación Sociolaboral de las Mujeres con Discapacidad de Extremadura,  se impartirán sesiones formativas en  siete municipios, para dotar a este colectivo de habilidades que refuercen su autoestima y donde adquieran más recursos para moverse con más éxito en el mercado laboral.

En la región hay 53.000 mujeres de este colectivo, de las cuales el El 74 por ciento percibe unos ingresos de unos 500 euros mensuales, de ahí la “necesidad imperiosa” de poner en marcha iniciativas como ésta, que supone un “paso adelante” para optar a un puesto de trabajo, según señaló el Consejero de Sanidad y Políticas Sociales, José María Vergeles, durante su presentación.

Esta primera experiencia en la Comunidad se centra en “empoderar” al colectivo “para que en un futuro pueda acceder a un empleo”, ha reiterado el director gerente de CERMI en la región, Alfonso Cortés.

Según ha indicado, la Fundación CERMI Mujeres ha elegido Extremadura para desarrollar esta experiencia piloto por los índices de inactividad de las personas con discapacidad y por su dispersión geográfica, como recoge Efe.

Localidades

Este proyecto arrancará el 27 de septiembre  con la programación  de talleres en Badajoz, Cáceres, Don Benito, Mérida, Navalmoral de la Mata, Plasencia y Zafra, que están  centrados en la formación y orientación para el empleo, como la confección de currícum que contará también con la colaboración de la Fundación ONCE.

Además desde la organización hacen una llamamiento al mundo empresarial puesto que la “empresa tiene que ser alguien muy importante ” que aporte ayuda “en el ímpetu” que persigue esta experiencia sociolaboral que trata de mejorar la vida e independencia de miles de mujeres.

Se trata de poner en marcha actuaciones dirigidas a conseguir “revertir los espacios de exclusión de este colectivo” que se producen en el ámbito de la producción, el ingreso y el consumo debido a su escasa participación en el mercado laboral. 

Ampliar experiencia

El objetivo para el futuro es poder ampliar la experiencia con nuevas acciones  y que esta experiencia  sirva de base para el futuro Plan de Acción Mujer y Discapacidad, en el que trabaja la Junta de Extremadura, a través del Instituto de la Mujer, con la implicación de diferentes agentes como los sindicatos y el Consejo Económico y Social.

Según informa CERMI Extremadura, se trata del “primer paso” de una acción dirigida a las mujeres con discapacidad desempleadas cuya finalidad última es “su efectiva activación para la inclusión sociolaboral”.