Jubilados extremeños se manifiestan en defensa de unas pensiones dignas y contra los planes privados
Los jubilados extremeños han reiterado este lunes en plazas y calles de la región su rechazo al producto paneuropeo de pensiones individuales. Han exigido pensiones dignas y han rechazado las “ridículas” subidas de las retribuciones acordadas por el Gobierno.
En Mérida, alrededor de 300 pensionistas se han concentrado en la plaza de España para decir “basta ya” a la política de mínimos del Ejecutivo central, “que prefiere rescatar autopistas y bancos, pero no a quienes han trabajado toda su vida”.
Uno de los portavoces de la Plataforma Local de Jubilados y Pensionistas, Celedonio Salguero, ha explicado que las propuestas del Gobierno en esta materia no son justas y no aportan “futuro” a las pensiones.
“El problema de las pensiones es presente y futuro”, ha añadido Salguero, quien ha instado a los jóvenes a participar en estas concentraciones de protesta. Este colectivo ha entregado una propuesta de moción en el consistorio emeritense relacionada con el denominado Producto Europeo de Pensiones Individuales (PEPP), el cual rechazan por entender que se pone en peligro la sostenibilidad de los planes públicos de pensiones.
También en Cáceres
Decenas de pensionistas se han concentrado en la escalinata del edificio consistorial, convocados por la Coordinadora Estatal por la Defensa del Sistema Público de Pensiones, para reivindicar unas pensiones “más justas”.
Según ha explicado su coordinador en la ciudad de Cáceres, Javier Comín, la plataforma, presente en unas veinte localidades extremeñas, ha presentado a los grupos políticos municipales un escrito con una moción para que el Ayuntamiento muestre su rechazo a este proyecto europeo y pida al Gobierno estatal que no lo defienda, por lo que se manifestarán todos los lunes hasta que les “hagan caso”.
Parte de los jubilados, que se han manifestado al grito de “más pensiones y menos ladrones” y “no al 0,25, sí al IPC”, previamente han aprovechado la presencia en el Ayuntamiento del ministro de Justicia, Rafael Catalá, para mostrarle su descontento con el Gobierno.
Además de la revalorización de las pensiones por el IPC, entre otras de sus reivindicaciones están la derogación de las reformas de las pensiones de 2011 y 2013, que exista una mínima de 1.080 euros “como recomienda la Carta Social Europea” y restablecer la jubilación a los 65 años.
La Coordinadora también solicita la presencia de los pensionistas en la mesa de negociación, con una fórmula distinta al Pacto de Toledo, según el manifiesto leído hoy.
En él se expresa que la última medida del Gobierno de subir las pensiones un tres por ciento a casi tres millones de personas, “obligada” por las manifestaciones de este colectivo el 22 de febrero y el 17 de marzo, no es suficiente para satisfacer sus reivindicaciones. En este sentido, da, entre otros motivos, que este año “más de la mitad de las pensiones perderán poder adquisitivo y solo una de cada cuatro pensiones de viudedad se beneficiarán de la subida anunciada”.
