El BNG mantiene su rechazo a los planes del Gobierno para la eólica marina

El BNG, una de las formaciones que apoyó la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno, está en desacuerdo con los proyectos del Ejecutivo para el desarrollo de la eólica marina. El diputado nacionalista gallego en el Congreso, Néstor Rego, ha reiterado el rechazo a los planes de ordenación del espacio marítimo (POUM) aprobados hace un año y ha vuelto a reclamar su retirada. Además, ha presentado sus alegaciones al nuevo real decreto que regula la instalación de estos parques y ha dado su apoyo a una manifestación convocada para el próximo sábado en Burela (Lugo) contra los proyectos planteados.

La formación, dijo Rego, “continúa rechazando la hipótesis misma de que se instalen polígonos empresariales de producción de energía eléctrica en la costa gallega” porque ve esta explotación “incompatible” con la preservación de los ecosistemas y con la pesca. Argumentó que “no hay conclusiones claras e incontestables desde el punto de vista científico” sobre los impactos de estos parques en el mar y se remitió a una instalación que hay con tres aerogeneradores frente a Viana do Castelo, en Portugal: “Se pueden escuchar los numerosos testimonios de pescadores indicando que en un radio de kilómetros desapareció la pesca”.

La formación nacionalista ha presentado como cuestión previa la retirada de los POEM, pero también ha registrado alegaciones al proyecto de real decreto que regula la producción de energía eléctrica de los parques instalados en el mar. Son 31 en total y un tercio de ellas se refieren, expuso Rego, a cuestiones competenciales. El BNG pide una coordinación entre la administración central y la gallega para la tramitación de los permisos y que la Xunta tenga que hacer un informe preceptivo y vinculante sobre el impacto social y económico de los parques en Galicia. También que tenga que elaborar un informe de impacto ambiental.

Este proyecto de real decreto estuvo sometido a exposición pública, con plazo para presentar alegaciones entre el 27 de febrero y el 25 de marzo. Una vez concluido, el Gobierno puede tener en cuenta las consideraciones que se han aportado antes de aprobar el documento definitivo en el Consejo de Ministros.

El BNG pide también que haya participación pública en las instalaciones de producción de energía en el mar y que se cree una empresa para ello, con el fin de evitar que la producción energética redunde exclusivamente en “lucro” de compañías privadas. Además, reclama que, cuando caduque una concesión, esta pase a explotación pública. También reitera su propuesta de crear una tarifa eléctrica gallega, que defiende por la cantidad de energía producida en Galicia: “No es que sea una obsesión del BNG. Es una cuestión de justicia”.