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La dirección de la CRTVG niega “valentía” del personal movilizado en los 'viernes negros' contra la manipulación

Personal de la CRTVG, en la sede central de la compañía durante el octavo viernes negro

David Lombao

La agenda parlamentaria gallega suele situar en los viernes las comparecencias del director general de la Corporación Radio Televisión de Galicia (CRTVG) en la comisión de la Cámara dedicada a los medios públicos. Esto provocó este 13 de julio que, otra vez, Alfonso Sánchez Izquierdo haya tenido que acudir al legislativo coincidiendo con un nuevo 'viernes negro', el octavo en el que personal de la Televisión de Galicia y de la Radio Galega se moviliza con reivindicaciones como el cumplimiento “íntegro” de la ley de medios del año 2011 o el fin del que, afirman, es un control gubernamental de la información. Lo hizo para presentar la memoria “sobre la ejecución de la función de servicio público” de la CRTVG durante el pasado año.

En los dos meses que ya duran las protestas con este formato -centrales sindicales y comité intercentros ya habían desarrollado diversas acciones anteriormente-, personal que participa de ellas ha venido alertando de un “creciente mal clima laboral que está generando la dirección” precisamente, por las propias movilizaciones y su trascendencia pública, especialmente intensa desde que los dos presentadores del Telexornal Serán -informativo de la noche- anunciaron su renuncia a continuar conduciendo este espacio en la próxima temporada como muestra de discrepancia con el icho control informativo. Todas estas circunstancias fueron reprochadas desde las bancadas de la oposición a Sánchez Izquierdo, que una vez más restó relevancia a las reivindicaciones y dio la ley por ampliamente cumplida.

Después de que, en nombre del BNG, la diputada Noa Presas subrayara los 'viernes negros' como un ejercicio de “valentía” del personal que los secunda, el director general se mostró especialmente contrariado. “Pero vamos, ¿valentía, valentía?”, se preguntó. “No”, resolvió a continuación. Si acaso, asegura, se tratará de la “expresión pura y democrática” de una reivindicación que, a su juicio, es “respetada absolutamente” desde la dirección de la empresa pública. “¿Pero, valentía? Por favor; yo sí que podría hablarles de valentía en otras circunstancias históricas”. “Valentía, por supuesto que sí”, replicó Presas, quien recuerda que “no todos los trabajadores son fijos” y “aunque no te puedan despedir, hay muchos otros mecanismos para tener consecuencias” por estas movilizaciones. Igualmente, el personal movilizado manifestó su rechazo a las palabras del director general en las horas siguientes al debate.

También discrepa el director general del juicio de la parlamentaria del Bloque sobre de la “dimisión” de los conductores del Telexornal Serán, Tati Moyano y Alfonso Hermida. “Permítanme un mínimo rigor conceptual”, apeló Sánchez Izquierdo. “No dimiten, pueden renunciar a sus tareas, pero no dimiten” y además “ambos trabajadores siguen en su tarea a fecha de hoy”. Ambos habían anunciado que así lo harían hasta después del verano.

Una ley de medios “muy cumplida”

Tanto Presas como Ánxeles Cuña, de En Marea, y Luis Álvarez, del PSdeG, aludieron en sus intervenciones a la necesidad de que, como pide el personal movilizado, la ley de medios del año 2011 sea cumplida íntegramente y, concretamente, sean aplicados preceptos del texto como la aprobación del Estatuto Profesional y la puesta en marcha de los Consejos de Informativos. “Da la sensación de que una ley que no se cumple”, pero “es una ley muy cumplida” excepto “tres aspectos clave” de los que solo uno es responsabilidad suya, dice: la aplicación de la figura del contrato-programa, retrasada por cuestiones fiscales. Tanto el Estatuto como el Consejo, resalta, es competencia del consejo de administración y en cualquier caso, advierte, el Consejo de Informativos “no es el bálsamo que vaya a garantizar la calidad de los contenidos” de los Telexornais. No obstante, admite estar de acuerdo con que “es posible otra televisión”.

Sánchez Izquierdo ofreció su visión de la compañía en un contexto en el que, una vez más, la oposición lo acusó de avalar la injerencia del Gobierno gallego y el escoramento de la línea informativa a favor del PP. Esta acusación fue rechazada tanto por la portavoz popular en la comisión, María Antón, como por el propio director general, aludiendo a Televisión Española, donde según Sánchez Izquierdo se “vislumbran” unos “pasos ciertamente inquietantes”. Este viernes, precisamente, el personal de RTVE se movilizó en el que por el momento será su último 'viernes negro' al estar ya fijado el plazo para la renovación de los órganos de la compañía por concurso público.

Antón aludió también -como hizo Feijóo esta misma semana- a la etapa del Gobierno de PSdeG y BNG (2005-2009) como ejemplo de manipulación informativa. La nacionalista Presas replicó a esa alusión con el “ejemplo” de una respuesta escrita de la CRTVG en el año 2006, con el bipartito en la Xunta, en la que “el Gobierno contestaba al señor Diego Calvo”, actual vicepresidente del Parlamento por el PP, que había reclamado una relación completa de personas participantes en la desaparecida tertulia Hai Debate!, un coloquio en prime time sobre temas de actualidad. “¿Alguien imagina que en 2018 pueda haber en la CRTVG un debate con un miembro del Gobierno, fuerzas de la oposición y representantes sindicales, y además con público?”, cuestionó. “El pasado está ahí y con el tiempo -afirma- podremos hacer memoria de lo que era un compromiso con las libertades democráticas” frente a la actual “degeneración”, afirma.

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