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“La izquierda en Galicia debería tomar ejemplo de la unidad sindical”

Xosé Manuel Sánchez Aguión, secretario xeral de CCOO-Galicia

Miguel Pardo

Xosé Manuel Sánchez Aguión, secretario general de CCOO-Galicia, se muestra convencido de que la huelga general del próximo 14 de noviembre tendrá aún más apoyo que la última en Galicia y pide que la colaboración sindical se traslade también al ámbito político progresista. Califica el paro como “inevitable” por el “destrozo” que está provocando el PP y critica con dureza la negativa del CSI-F a secundarlo.

¿Cómo afronta CCOO esta nueva huelga general?

Se afronta con mucha energía porque es una huelga inevitable delante del auténtico destrozo que se está haciendo con los derechos laborales y sociales en nuestro país. Los últimos Presupuestos son más de lo mismo, más recortes y más ajustes, por lo que suponen también más paro. No hay una sola medida que vaya en el camino de la reactivación económica y que permita vislumbrar una recuperación económica ni de generación de empleo o por lo menos que pare esta sangría. Los últimos datos de desempleo y de pobreza horrorizan, por lo que exigen un cambio de rumbo de este Gobierno y una respuesta de la ciudadanía.

¿No cree que la victoria por mayoría absoluta del PP puede disminuir la participación en la huelga general?

Nosotros hacemos una lectura bien diferente. Es incuestionable que con las actuales reglas de juego y con esta ley electoral, el PP revalida su mayoría absoluta, pero queremos poner en evidencia que el Partido Popular tiene tres diputados más con casi 140.000 votos menos y con un apoyo real de la ciudadanía del 24% de la población. Tiene legitimidad, pero muestra también la absoluta barbaridad que supone esta ley electoral donde, además, siempre salen sobrerrepresentadas las zonas rurales frente a las zonas urbanas, donde están los núcleos fundamentales de la población. La ley d'Hondt, que favorece a las fuerzas mayoritarias, y la división de la izquierda favorecieron que el PP revalidara la mayoría absoluta.

¿Los resultados en las ciudades son una esperanza para la izquierda?

En las grandes ciudades gallegas, donde se concentra el 80 o 90% de la clase trabajadora, la contestación a estas políticas del PP fue muy clara. En las urbes ganó la izquierda y ganó con mucha claridad en las siete grandes ciudades y en una parte importante de aquellas villas donde se superan los 25.000 habitantes. Feijóo escondió a Rajoy durante la campaña porque no le interesaba que se le vinculara con la política de recortes que está desarrollando el Gobierno central. Además, es evidente que adelantó las elecciones para evitar que los efectos de un posible rescate que está al caer tuvieran también efectos electorales negativos sobre él.

Por lo tanto, ¿prevé un gran apoyo a la huelga general del 14N?

Va a haber una respuesta fuerte, masiva y contundente de los trabajadores y de la ciudadanía en general porque estas medidas no afectan sólo a la clase trabajadora, sino al conjunto de la ciudadanía. A los trabajadores les afecta dos veces en su doble condición de trabajadores y ciudadanos. Se pierde su puesto de trabajo y cualquier tipo de complemento de retribución o pensión, el encarecimiento de la vida le afecta como ciudadano. Lo que se trata es de tener una vía de denuncia que se va a hacer muy patente el próximo 14 de noviembre.

Pero ahora el Gobierno del PP parece tener las manos libres para continuar con los recortes...

Este Gobierno tiene que empezar a tomar nota y respetar una regla de juego básico en democracia que es que no se puede mentir impunemente. Rajoy ganó las elecciones prometiendo unas políticas distintas a las que está desarrollando. La democracia no empieza y termina votando cada cuatro años. Los sindicatos estamos legitimados para oponernos frontalmente a las políticas que son claramente lesivas para aquellos a los que representamos. En democracia no se puede hacer un fraude a la ciudadanía como la que está cometiendo el PP. El PP gallego y español se equivocan si hacen una lectura equivocada de apoyo a estas medidas. El día 14 va a quedar muy claro que esto no es así.

La movilización y el apoyo a la última huelga general en Galicia fue vanguardia en el conjunto del Estado, ¿se mantendrá ese nivel tras las elecciones?

Esperamos algo parecido e incluso superior. Ve a haber un salto cualitativo importante porque los efectos de la crisis no afectan sólo a los trabajadores sino a toda la ciudadanía. Hay millares de pequeños empresarios y autónomos que están sufriendo los efectos de la crisis y que están viendo cómo se rescatan los bancos y el sector financiero pero no ven que esto contribuya a reactivar la economía y las líneas de crédito. Muchas pequeñas empresas, el 80% del empleo en España, están cerrando porque los bancos las ahogan. Los autónomos y pequeños y medianos comerciantes también se van a rebelar y van a suponer un salto cualitativo con respecto a otras huelgas anteriores.

¿La unidad de acción sindical es un factor clave para mantener esta movilización?

El movimiento sindical en España, y de manera especial en Galicia, demuestra un grado de madurez y responsabilidad importante, sabiendo alejar las diferencias legítimas que tenemos para sobreponer lo que nos une, que es infinitamente superior a lo que nos separa. Supimos hacerlo y estamos haciendo un esfuerzo por luchar en común desde las organizaciones de clase. Esto debería ser un ejemplo para la izquierda política en este país. Habría que acabar con las reyertas y con las miserias internas porque eso beneficia la derecha política e ideológica que, como yo digo siempre , conforma gobiernos que tienen un contenido claramente ideológico. Le dan la vuelta como un calcetín a este país para derribar aquello por lo que durante muchísimos años lucharon millares de personas y que se consiguió incluso dejando la vida en el intento: el Estado de Bienestar y Estado social que coloca a las personas y a los intereses colectivos por encima de los particulares y que coloca la justicia y equidad social en unos mínimos básicos. Hay que combatir estas políticas y es importante que la izquierda se una y defina un proyecto claro frente a esta derecha.

¿Ve posible esa unión de la izquierda en Galicia?

Digo que sería deseable, lo de posible lo veo más complicado. Si algo tenemos que aprender de la derecha es que ellos saben soldar y defender muy bien sus intereses tapando sus diferencias. La defensa del Estado de Bienestar y del papel que tiene que jugar el Estado como elemento redistribuidor sólo lo puede hacer la izquierda, que es capaz de ponerse de acuerdo en eso aunque haya matices y diferencias sanas. Si nos metemos en reyertas partidarias, el PP seguirá encantado y seguirá gobernando este país.

¿Qué opinión le merece la negativa del CSI-F a secundar la huelga general?

La valoración es evidente. La CSI-F se muestra cómo lo que es: un sindicato corporativo y sectario que sólo defiende los intereses de una parte de los trabajadores, obviando que la crisis y la gestión de ella afecta al conjunto de la ciudadanía. Los funcionarios no dejan de ser ciudadanos al marcharse de sus puestos de trabajo, también les están afectando estas políticas. Se aprobó el reglamento de los EREs en la función publica y puede que el CSI-F piense que como los EREs sólo afectan al personal laboral no les debería importar o preocupar una regulación que es infumable. Su postura nos parece lamentable. Si los empleados públicos tenían razones para ir a la huelga general, esto les da más razones aún, pero el CSIF sabrá lo que hace y sus representados sabrán por que toman este tipo de decisiones. No sé si defienden bien los intereses de los funcionarios, pero desde luego creo que no los del conjunto de los trabajadores.

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