El Pórtico de la Gloria reabre para visitas dentro de una gran 'caja' y con entradas a diez euros
En verano de 2018 quedó al descubierto el resultado de casi una década de trabajos -tres de ellos de intervención directa- de restauración del Pórtico de la Gloria, un proyecto que tuvo como resultado más visible la recuperación de la policromía de la obra del Maestro Mateo, pero también su recuperación y protección tras mucho tiempo de deterioro. La apertura a las visitas del monumento tras la restauración financiada por la Fundación Barrié suscitó una enorme expectación, con alrededor de 80.000 personas en menos de dos meses antes del nuevo cierre para la continuación de los trabajos en el templo.
Desde este 2 de enero el Pórtico vuelve a estar abierto a las visitas, pero con notables cambios en la forma y en el fondo. La que había sido portada de la vieja Catedral románica compostelana está “encapsulada”, esto es, dentro de una gran estructura de madera que separa el Pórtico del resto del recinto. Esta estructura actúa a modo de enorme caja para evitar filtraciones y polvos procedentes de las obras de restauración que continúan en otros puntos próximos de la Catedral, las cuáles “se prolongarán hasta las puertas del próximo Año Santo 2021”, según cálculos de la Fundación Catedral y del Cabildo.
Al otro lado de ese “encapsulamiento” la principal y más controvertida medida es la del cobro de entradas por visitar el Pórtico. Como había avanzado la Catedral, la tarifa general por visitar únicamente el Pórtico restaurado es de 10 euros que se quedan en 8 con la “tarifa reducida” para familias numerosas, personas en desempleo, estudiantes, peregrinos y mayores de 65 años. En el caso de los grupos escolares el precio es de 2 euros por estudiante.
Las visitas pagadas, con guía y de una duración de unos 45 minutos para las que es necesario reservar a través del sitio web de la Catedral o en las taquillas del museo del templo, serán ahora el modelo que la Catedral ofrezca como prioritario. Existen también, no obstante, invitaciones que dejan la puerta abierta a las visitas gratuitas que habían reclamado en los últimos meses el Ayuntamiento de Santiago y las fuerzas de la oposición parlamentaria gallega, entre otros.
Estas invitaciones son un total de 50 “para el público general” en las visitas de lunes a sábado y 100 más para visitas de residentes Santiago los domingos por la tarde. Para retirarlos es necesario acudir a la taquilla de la Casa do Deán -en la Rúa do Vilar-, donde cada jornada se distribuyen las invitaciones del día siguiente “por orden de llegada”. En el caso de los destinados a personas vecinas de la ciudad es necesario “acreditar la condición de vecino de Santiago” a través del carné de identidad o del certificado de empadronamiento.
