Obama saluda a Raúl Castro en el funeral por Mandela
Las imágenes de un centenar de jefes de Estado y de Gobierno reunidos en el mismo lugar tienen la capacidad de producir muchas situaciones llamativas. Pocas tan poco habituales como el saludo de Barack Obama y Raúl Castro en el funeral de Nelson Mandela en Suráfrica.
Sólo ha sido un breve momento, pero no una situación imprevista para el presidente de EEUU. Obama subía por la escaleras hasta el lugar que tenía asignado en la tribuna. El primero de los líderes con los que se ha encontrado era precisamente el presidente cubano. Obama le ha dado la mano, ha sonreído, como también lo ha hecho Castro, y ha intercambiado unas breves palabras. Parecía que el cubano no tenía inconveniente en continuar la conversación, pero Obama ya estaba listo para saludar al siguiente presidente que estaba a continuación de Castro, la presidenta brasileña, Dilma Roussef.
Los miles de sudafricanos que abarrotan el estadio FNB de Soweto, en Johannesburgo, para participar en la ceremonia recibieron con júbilo a Obama al advertir su llegada al estadio. Obama fue de los últimos mandatarios en llegar al servicio religioso, casi una hora después de que hubiera dado comienzo.
Las cerca de 80.000 personas que miraban las pantallas del estadio advirtieron por sorpresa que Obama ya se encontraba en el graderío de autoridades.