Las HoloLens funcionarán mejor que Kinect en habitaciones cerradas
Kinect era un proyecto ambicioso en sus inicios. Microsoft lanzó este dispositivo para Xbox One con grandes planes, pero varios errores de concepto (como por ejemplo, que su uso esté restringido a habitaciones de unas dimensiones grandes) ha acabado con sus posibilidades de triunfar entre los usuarios. Algo que la compañía no piensa repetir con sus HoloLens.
En el último número de la revista oficial de Xbox, Kudo Tsunoda, responsable de desarrollo del dispositivo, ha hablado sobre sus planes para evitar unos resultados como los de Kinect, centrándose especialmente en su compatibilidad con habitaciones pequeñas.
“Creo que el problema con Kinect se deriva del desafío que es el estar moviéndote mucho a su alrededor [...] Así que eso no funciona bien en habitaciones pequeñas” ha explicado. “Con HoloLens es algo completamente diferente porque con la tecnología de sensibilidad y profundidad que emplea podemos entender todo a tu alrededor en 3D. No hace falta más o menos espacio, nosotros detectamos el ambiente e ideamos cómo poner los hologramas en los lugares correctos”.
En este sentido, el desarrollador ha puesto como ejemplo un personaje holográfico, que podrá adaptarse al entorno donde se encuentre. De esta forma, si hay un sofá podrá sentarse en él, o caminar al otro extremo de la habitación, apoyarse en la pared o cualquier superficie, etc. “Puedes tener al personajes haciendo cosas específicas que se adapten a tu entorno, y creo que eso es asombroso”.
Tsunoda ha comentado que este cambio se ha realizado pensando en las diferentes casas que pueden tener los usuarios. “En tu casa probablemente habrá habitaciones de diferentes tamaños, así que cuando vayas a jugar a un sitio u otro tendrás sensaciones diferentes con este dispositivo. Me parece una de las partes más geniales y curiosas de usar hologramas”.
¿Será HoloLens tan impresionante como intentan hacernos creer? Habrá que esperar para ver cómo funciona realmente el dispositivo, y si repite o no el fracaso de Kinect.
