Casado acusa a Sánchez de “alentar a la prevaricación” a Ayuso por “obligarle a dictar” una orden para cerrar Madrid

El líder del PP, Pablo Casado, ha acusado al Gobierno de Pedro Sánchez de “alentar a la prevaricación” a la Comunidad de Madrid por “obligarle a dictar una orden que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid dijo que no era correcta”. Aunque después ha admitido que la ley de Salud Pública de 1986, que invocaba Ciudadanos en la negociación para evitar esta situación, habría permitido limitar la movilidad en Madrid como pedía el Gobierno. Todo ha sucedido en su primera comparecencia pública tras la declaración del estado de alarma.

Las acusaciones vertidas hacia el Gobierno llegan después de que el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ratificara el cierre de las ciudades de León y Palencia, ordenado por el Gobierno castellanoleonés de PP y Ciudadanos. Esto ha obligado al líder del PP a explicar por qué en esta región el PP sí ha apoyado cerrar ciudades completas y se niega en Madrid. “Es como si el Gobierno dijera que se confinara a todo Castilla y León. Avila diría que tiene una incidencia que no es como la de Palencia. Eso ha pasado en Madrid con los distritos. Es o es lo que estamos pidiendo, que se limite solo la movilidad en las zonas con incidencia alta”, ha explicado Casado.

En una rueda de prensa simultánea a la ofrecida por el Gobierno tras el Consejo de Ministros extraordinario, el presidente del Partido Popular ha cerrado filas con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y ha confirmado que la capital “cumplirá la ley siempre”. Aunque ha recordado que el estado de alarma deberá votarse en el Congreso de los Diputados dentro de 15 días sin aclarar cuál será su voto entonces. En las últimas horas, múltiples cargos del PP han cargado contra la “decisión autoritaria” de Sánchez al utilizar el instrumento del estado de alarma en este caso. “Es aplicar un 155 sanitario”, ha lamentado el portavoz nacional del partido y alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida.

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Casado ha profundizado en esa crítica. El líder del PP considera que el Gobierno no ha acometido las reformas jurídicas que prometió para afrontar estas eventualidades por repuntes de contagios tras el estado de alarma. Fue una promesa del Ejecutivo que nunca se cumplió. “El auto del jueves demuestra que Sánchez estaba equivocado. Con su habitual prepotencia va a la excepcionalidad legal. No se ha atrevido a convocar otra vez al Consejo Interterritorial”, ha afirmado Casado, que ha tendido la mano a Sánchez para reformar las leyes sanitarias y tomar medidas sin recurrir al estado de alarma.

A los conservadores les ha molestado especialmente el argumento con el que el ministro Salvador Illa ha justificado el estado de alarma: la salud pública. “No vamos a aceptar que salgan diciendo que salen a proteger la salud de los madrileños como si la Comunidad de Madrid no estuviera haciéndolo”, ha señalado Casado.

Para el líder del PP, sin embargo, el estado de alarma se ha aplicado como “una medida aleatoria y discrecional con intereses políticos”, como una forma “de tapar medidas eficaces”. “Hoy Madrid no cumpliría los requisitos del propio ministro para ser cerrada porque tiene menos de 500 casos por cada 100.000 habitantes. ¿Por qué no ha aceptado lo que le decía la consejería de Sanidad?”.