El Instituto Cervantes recuerda a Jardiel Poncela con una gran exposición
El Instituto Cervantes inauguraba ayer lunes 18 de noviembre en su sede central de la calle Alcalá número 49 la exposición «Enrique Jardiel Poncela, la risa inteligente». Un recorrido panorámico por la obra del prolífico autor y maestro del humor del pasado siglo.
La muestra se compone de 150 piezas, que permiten al visitante descubrir su variada y prolífica obra como escritor, crítico, humorista, director cinematográfico o ilustrador, entre otras facetas profesionales.
La puesta de largo corrió a cargo del director del Instituto Cervantes, Juan Manuel Bonet; el comisario de la exposición, Sergio Muro; y Enrique Gallud Jardiel, nieto de Jardiel Poncela y autor del libro La risa inteligente. También participaron en la inauguración la también comisaria Eva Lapuente, Carlos Dorrell (nieto de Jardiel) e Ignacio Egea Krauel, vicepresidente de la Fundación Repsol, que patrocina la exposición.
Jardiel Poncela, vecino de Chueca y prolífico creador
Nacido en Madrid en el año 1901 en la calle Augusto Figueroa, Enrique Jardiel Poncela vivió en la calle Infantas número 40 desde 1939 hasta su muerte en el año 1952. Muchas de las obras que le hicieron famoso y por las que hoy es recordado (como “Eloísa está debajo de un almendro”, “Los ladrones somos gente honrada” o “Los habitantes de la casa deshabitada) se escribieron precisamente en esta vivienda del barrio.
Hoy, el Instituto Cervantes repasa en esta exposición la obra de este creador plural y permite releerla a la luz del presente cultural. Como autor, Jardiel Poncela fue dramaturgo, novelista, poeta, narrador, guionista, ensayista… Dominó el lenguaje literario con gran agudeza y, gracias a su genio creativo, se convirtió en un fenómeno literario y cultural.
Entre las 150 piezas que se exponen encontramos manuscritos originales, primeras ediciones, revistas, cortometrajes, películas, dibujos y cartas, así como sus iniciativas como empresario, director e inventor; así como reproducciones de tiras cómicas, carteles y documentación de sus actividades artísticas y literarias.
Pero la exposición tampoco olvida su faceta más personal. Sus orígenes familiares, sus vínculos con Aragón, su formación cultural, sus inicios como escritor, su vida familiar y sentimental, sus viajes a Estados Unidos, su rutina creativa, la Guerra Civil o hasta el relato de su enfermedad y miseria se muestran en la primera parte de la muestra.
El segundo bloque se dedica a su obra, hábitos de trabajo y proceso creativo en relación con el fenómeno actual, mientras que el tercero se centra en su imagen de visionario ecléctico y su carácter emprendedor. También se incluye la primera película en verso, Angelina, o el honor de un brigadier, los Celuloides rancios que realizó en París superponiendo diálogos cómicos a películas mudas o los bocetos de un nuevo modelo de teatro que el propio Jardiel diseñó. La muestra se completa con algunas de sus películas y el documental de RTVE Inverosímil Jardiel Poncela.
La iniciativa ha sido posible gracias a la cesión del legado de la familia del autor, aportaciones a las que se han sumado entidades e instituciones como RTVE (La 2), la Biblioteca Nacional, la editorial Doce Robles y el Ayuntamiento de Quinto de Ebro (Zaragoza).
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