El nuevo Mercedes GLA gana en carácter, practicidad y eficiencia
Hasta hace unos años, muchos de quienes compraban un Mercedes buscaban satisfacer un sueño postergado después de muchos años de trabajo y, en general, querían un modelo lujoso en el interior, pero clásico en sus rasgos exteriores. En los últimos tiempos, el nuevo diseño de los coches de la estrella ha sumado a este comprador tradicional una abundante clientela de conquista más joven y seducida por vehículos más dinámicos y de estética más fresca y atrevida.
El Mercedes GLA es uno de estos últimos y basa su éxito en el añadido de una carrocería SUV que sintoniza a la perfección con los gustos actuales. Más alto (+10 cm) y ligeramente más corto (-1,5 cm) que su predecesor, gana en presencia y carácter y ofrece paradójicamente mayor espacio en las plazas traseras, que además pueden desplazarse 14 centímetros a lo largo, si se escoge la opción correspondiente. El maletero aumenta su capacidad en 14 litros.
Estas mejoras en el aspecto práctico se acompañan de otras en seguridad y eficiencia en el capítulo de motores, donde la marca de Stuttgart sigue apostando fuerte por la tecnología híbrida enchufable, tanto que para finales de este año tendrá a disposición del público una veintena larga de versiones recargables en la red eléctrica dentro de su gama.
En el caso del GLA, dispondrá de una variante de este tipo con 61 kilómetros de autonomía, medidos en el ciclo de homologación WLTP, y etiqueta Cero emisiones en el mercado español. A la venta desde 51.000 euros, Mercedes confía en que concentre el 30% de las entregas del modelo en el segundo semestre de este año.
El GLA 250 e, como se denomina comercialmente, combina un motor de gasolina de cuatro cilindros, 1,3 litros y turbocompresor y otro eléctrico para obtener 218 caballos de potencia conjunta y 450 Nm de par. Puede acelerar de 0 a 100 km/h en 7,1 segundos y alcanzar 220 km/h de velocidad máxima utilizando los dos propulsores.
La batería, de 15,6 kWh de capacidad, admite recargas en corriente alterna y continua. En el primer caso, y a una potencia de 7,4 kW, se necesitan 1,45 horas para recuperar del 10 al 100%. En una toma de corriente continua a 24 kW, son necesarios 25 minutos para pasar del 10 al 80 % de la carga.
Gracias a un acuerdo suscrito con Iberdrola, los compradores de esta versión contarán gratuitamente con un punto de carga en su domicilio y con una ventajosa tarifa nocturna de 3 céntimos por kW/hora que, según cálculos de la marca, permitirá recorrer 2.000 kilómetros con un gasto de electricidad comprendido entre 40 y 60 euros.
Las novedades en cuestión de seguridad del nuevo Mercedes consisten en ayudas a la conducción mejoradas. El GLA incorpora de serie el detector activo de cambio de carril y un asistente de frenado activo con funciones ampliadas que se encarga de iniciar un frenado autónomo para evitar una colisión o, al menos, mitigar su gravedad. Este sistema es capaz también de frenar ante vehículos detenidos al circular a la velocidad habitual en el tráfico urbano, y si la situación lo permite puede llegar incluso a evitar el impacto.
El paquete de asistencia a la conducción comprende además la alerta al salir del vehículo si se acercan ciclistas u otros vehículos y una advertencia preventiva si se reconocen personas en el entorno de un paso de peatones.
En el interior del SUV compacto alemán brilla con luz propia el moderno sistema multimedia MBUX, compuesto de serie por dos pantallas de 7 pulgadas cada una, la primera para el cuadro de instrumentos y la segunda para el equipo de infoentretenimiento, ya en el centro del salpicadero. Como opción, estas pantallas pueden ser de 10,25 pulgadas y configuran un imponente friso digital (widescreen), tan moderno como elegante, frente a los ojos del conductor.
El modelo está disponible desde 40.800 euros en versión de acceso de gasolina (GLA 200) con motor 1.3 de 163 CV y cambio automático de siete velocidades. Más demandado en España será el GLA 200 d (diésel) de 150 CV y transmisión automática de ocho marchas, que cuesta 41.125 euros y por 2.300 euros más incorpora tracción total 4Matic. Para disponer de este tipo de tracción en la gama de gasolina hay que escalar hasta la versión GLA 250 4Matic, de 224 caballos.
La dotación de serie en nuestro país incluye cambio automático de doble embrague, cámara de marcha atrás, sistema multimedia MBUX, climatizador automático, faros led High Performance, llantas de 18 pulgadas, barras longitudinales de techo de aluminio y portón trasero Easy-Pack, entre otros elementos.
