Jaecoo 7 SHS, poderío a la china
El Jaecoo 7 fue el modelo con el que debutó en nuestro mercado la marca englobada en el grupo chino Chery, al que pertenecen también Omoda, Lepas y -bajo una fórmula indirecta- la firma de origen español Ebro. Como iremos viendo, el modelo de Jaecoo comparte algunas de sus características con sus hermanos del gigantesco consorcio, no siempre para bien.
El coche llegó a España equipado con un motor de gasolina de 145 caballos que luego incorporó el Omoda 5, pero pronto se presentó la versión que traemos hoy a nuestra web: un mucho más interesante híbrido enchufable de 280 CV, autonomía eléctrica de 90 kilómetros y, por supuesto, distintivo ambiental 0 emisiones, el más ventajoso que concede la DGT.
De acuerdo con la información del fabricante, su autonomía total -sumando a la eléctrica la que proporcionan los 60 litros del depósito de gasolina- asciende a 1.200 km. Sin duda, otro de sus puntos fuertes es que los 90 km de alcance en conducción eléctrica le dan acceso a las máximas ayudas previstas en el Plan Moves III, es decir, las que corresponden por derecho a los vehículos 100% eléctricos.
El Jaecoo 7 SHS dispone de un sistema de impulsión que se compone de tres elementos principales. El primero es un motor de combustión de 1,5 litros y 143 CV desarrollado específicamente para modelos híbridos. A él se suma un cambio variable continuo en el que se integran dos motores eléctricos, uno por eje, de 60 y 150 kW. La potencia total asciende a 279 CV, aunque anteriormente la marca declaraba 340 CV sin que sepamos muy bien a qué se debe el cambio.
El coche puede funcionar de diferentes maneras: como eléctrico puro, híbrido en serie o híbrido en paralelo, así como en función de recuperación de energía. El sistema de gestión híbrido de la transmisión selecciona el modo ideal para cada situación de conducción en función de multitud de parámetros, y trabaja en todo momento para ofrecer lo que se pretende una experiencia suave y silenciosa al volante.
El tercer elemento del sistema híbrido es un paquete de baterías de 18,3 kWh que admite recarga en corriente continua, de hasta 40 kW, donde el paso del 30 al 80% de la capacidad lleva 20 minutos. En corriente alterna soporta un máximo de 6,6 kW, y a todo ello se añade función V2L de carga bidireccional para suministrar energía a dispositivos externos de hasta 3,3 kW.
El Jaecoo 7, tanto en versión de gasolina como enchufable, luce un aspecto de líneas cuadradas y robustas que recuerda a los 4x4 clásicos y especialmente a varios modelos de Range Rover. La parrilla delantera nos parece desde luego su elemento más poderoso y atractivo, y la que más miradas atrae, aunque la trasera tampoco carece de atractivo. Parte de la fuerza que transmite el coche se ha perdido, a nuestro parecer, en el Jaecoo 5, segundo modelo de la marca que se ha dado a conocer recientemente (puedes leer aquí el artículo).
En el interior destaca la amplitud de las plazas traseras, beneficiadas por la ausencia de túnel central y provistas de salidas de aire y tomas USB propias. El maletero, generoso en la variante de gasolina, pasa de 424 a 340 litros en la híbrida enchufable, en la que el plano de carga se encuentra notablemente más elevado y, por tanto, más cerca de la bandeja que oculta la carga.
Silencioso casi siempre
Al volante, el usuario se encuentra con la entrega de potencia suave que promete Jaecoo, y en tráfico urbano y tranquilo en general el vehículo se muestra además muy silencioso y confortable. La excepción se presenta cuando demandamos potencia de forma más contundente, la cual llega acompañada de una entrada ruidosa del motor de combustión.
El proceder del modelo chino es muy semejante al del Ebro s700 PHEV, del que te hablamos hace poco (puedes leer aquí el artículo) y que es mecánicamente el mismo coche. El funcionamiento del sistema híbrido nos parece un punto más afinado en el Jaecoo, pero comparten que ni uno ni otro parecen disponer de la potencia anunciada (280 CV, y mucho menos 340), si bien cumplen sin problemas en cualquier condición que presente el tráfico.
El aspecto más enojoso en ambos no tiene que ver con la potencia disponible, sino con algo tan básico como el manejo del selector del cambio automático. Al igual que en el s700 de Ebro, cuesta pasar con rapidez de D (marcha hacia delante) a R (marcha atrás), y viceversa, mediante un mando que se ha situado en la columna de dirección precisamente para facilitar y agilizar dicha operación.
Pues bien, lo habitual es que la palanca se quede en punto muerto (N) y haya que volver a pisar del freno mientras la desplazamos de nuevo para intentar iniciar el movimiento. No es necesario subrayar el riesgo que supone encontrarse tirado de esta forma en una situación apurada tanto en ciudad como, sobre todo, en carretera.
Por lo demás, el Jaecoo 7 lleva al extremo el gusto de los fabricantes chinos por concentrar todas las funciones del coche en una pantalla central, aquí de nada menos que 14,8 pulgadas y situada en posición vertical. La configuración de las alertas relativas a los sistemas de ayuda a la conducción (ADAS) es también del tipo invasivo que tienden a adoptar las marcas del gigante asiático.
Como es seña de identidad de Omoda&Jaecoo, el precio del modelo que hemos probado estos días resulta muy competitivo comparado con el de la competencia, máxime si se tiene en cuenta el equipamiento que embarca cualquiera de los dos acabados a disposición del cliente.
La versión Select, a la venta por unos 38.500 euros (antes de ayudas), lleva de serie 18 dispositivos ADAS, navegador, cámara panorámica, sensores delanteros y traseros de proximidad, tapicería de piel sintética, acceso sin llave y climatizador bizona, entre otros elementos.
El modelo Exclusive, desde 40.360 euros, agrega asientos delanteros calefactados y ventilados, volante equipado también con calefacción, portón trasero automático, techo solar panorámico, head-up display y carga inalámbrica para móviles.
